BILBAO. Durante su visita a la recién instalada Resonancia Magnética y el nuevo Acelerador Lineal del Hospital de Cruces, donde se ha reunido con profesionales sanitarios, Urkullu ha destacado que hoy se da un nuevo paso en la mejora del equipamiento y la atención del Servicio Público de Salud en el marco del proceso de mejora continua del diagnóstico y los tratamientos que Osakidetza ofrece a las personas enfermas de cáncer.

La incorporación de estos dos nuevos dispositivos de última generación han supuesto una inversión de 4,5 millones de euros y son fruto del acuerdo suscrito en 2017 entre el Gobierno Vasco y la Fundación Amancio Ortega, con una inversión total de 14.700.000 euros, destinados a mejorar el equipamiento para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades oncológicas.

Tras mostrar su agradecimiento a la Fundación, el lehendakari ha destacado que este nuevo acelerador lineal "es el más preciso, fiable y completo" de los que existen en la actualidad. Entre otras cosas, permite reducir los efectos secundarios a los pacientes, con lo que se abre "un amplio abanico de nuevas opciones terapéuticas".

Según ha apuntado, el nuevo acelerador lineal para radioterapia oncológica se suma a los dos con los que ya contaba este Hospital Universitario Cruces y un tercero que se encuentra en marcha en el Hospital Universitario Donostia. Los dos restantes se instalarán en el Hospital Universitario Basurto y en el Hospital Universitario Araba (Txagorritxu).

El lehendakari ha subrayado que, con todo ello, se "asciende un nuevo peldaño" en el compromiso con la prevención y detección precoz del cáncer, reflejada en el despliegue del Plan Oncológico de Euskadi 2023.

AUMENTO EN LA TASA DE SUPERVIVENCIA.

Iñigo Urkullu ha querido insistir en la concienciación social en la prevención porque la detección precoz a través de los programas de cribado de cáncer de mama, colon y cérvix "sigue siendo una prioridad". En este sentido, ha afirmado que esto ya tiene su traslación "en un incremento de las tasas de supervivencia y de la calidad de vida de las personas con enfermedades oncológicas, que sigue siendo la principal causa de muerte en Euskadi".

Urkullu ha asegurado que las ventajas del nuevo equipamiento "son directas para los pacientes, sus familias y, desde luego, para los profesionales". Destaca, según ha añadido, por su calidad de imagen, que permite un diagnóstico "más precoz y exacto". Además, proporciona mayor comodidad a los enfermos y sus familiares.

El Hospital de Cruces cuenta con tres aceleradores y la previsión es que pueda tratar a 1.500 pacientes cada año. El segundo equipamiento que se incorpora es una nueva resonancia magnética para radiodiagnóstico, lo que supone un "nuevo avance" para este centro hospitalario, que realiza anualmente en torno a 12.000 resonancias.

El lehendakari ha anunciado que su Gobierno seguirá invirtiendo "en renovar y mejorar" la tecnología al servicio de las personas, "contando siempre con el compromiso profesional y avanzando en la excelencia de la atención sanitaria en Euskadi". Autor: RGB/CVM