varsovia - Cerca de 150.000 inmigrantes irregulares llegaron en 2018 a la UE, la cifra más baja en los últimos cinco años, aunque las llegadas a España se doblaron por segundo año consecutivo, hasta alcanzar las 57.500 personas en 2018, según informó ayer la agencia Frontex.
El descenso en el número de llegadas a Europa se debe fundamentalmente a la drástica reducción en el número de inmigrantes en la llamada ruta del Mediterráneo Central, con destino a Italia, que en 2018 registró 23.000 personas, un 80% menos que en 2017.
El número de salidas con destino a Italia desde Libia cayó un 87% respecto a 2017, mientras que las de Argelia se redujeron en casi la mitad.
Los tunecinos y eritreos fueron las dos nacionalidades más representadas en esta ruta, y en conjunto representaron un tercio de todos los migrantes.
En ese mismo periodo, la llamada ruta del Mediterráneo Occidental, que llega a España, registró alrededor de 57.000 ilegales, más del doble que en 2017, cuando también se duplicó el número de llegadas en relación a 2016, según Frontex, cuya sede está en Varsovia.
La agencia europea destaca que la cifra de migrantes que llegaron a España en 2018 es la más alta desde que Frontex comenzó su actividad, hace más de una década. Los nacionales de Marruecos, Guinea y Mali representan el mayor número de llegadas en España en el pasado año.
En Grecia se registraron en 2018 cerca de 56.000 llegadas irregulares a través de la llamada ruta del Mediterráneo Oriental, un tercio más que en 2017, fundamentalmente por el aumento en el número de llegadas a través de las fronteras terrestres con Turquía. Los sirios y los iraquíes se mantienen como las dos principales nacionalidades en llegar a Grecia a través de la ruta del Mediterráneo Oriental.
La principal ruta migratoria a través de los Balcanes Occidentales, desde Serbia hasta Hungría y Croacia, sigue manteniendo un bajo número de migrantes irregulares, mientras que la ruta paralela a través de Albania, Montenegro y Bosnia está registrando una mayor presión migratoria, según la agencia.
El año pasado, Frontex comenzó por primera vez a recopilar datos detallados sobre el sexo y la edad de los inmigrantes irregulares, de los que se desprende que en 2018 las mujeres representaron el 18% de todas las llegadas, mientras que casi uno de cada cinco inmigrantes detectados dijo ser menor de 18 años.
canal de la mancha Por su parte, el Gobierno francés anunció ayer la elaboración de un plan de acción con el Reino Unido para reforzar los controles en el Canal de la Mancha y frenar el aumento exponencial de tentativas, por parte de inmigrantes, de cruzarlo en pequeñas embarcaciones en los dos últimos meses de 2018. “La perspectiva del brexit no altera para nada la necesidad de nuestros dos países de reforzar nuestra cooperación bilateral para poner en marcha medidas concretas y coordinar la lucha contra la inmigración ilegal”, destacó el ministro francés del Interior, Christophe Castaner.
Tras mantener una conversación telefónica con su homólogo, Sajid Javid, el pasado domingo, Castaner anunció ayer que sus ministerios preparan en la actualidad los “elementos precisos” del proyecto, que vendrá a completar las medidas nacionales con las que cada país hace frente a la situación.
Javid se comprometió a mantener el apoyo financiero y el despliegue de medios técnicos de detención y prevención de tentativas de salidas irregulares al mar, mediante drones, radares y videovigilancia. - Efe/DNA