Bilbao - Anunciaron un otoño caliente y los sindicatos de los colegios concertados han cumplido su advertencia de junio. ELA, Steilas, CCOO, LAB y UGT llamaron ayer a los trabajadores de los colegios vascos de iniciativa social, el 70 % de la enseñanza privada-concertada de Euskadi, a secundar las huelgas anunciadas para los próximos 9 y 10 de octubre en demanda de mejoras laborales. Representantes de dichos sindicatos justificaron ayer los paros por el “inmovilismo” de las patronales del sector (Kristau Eskola y AICE-IZEI). Dijeron que no les queda otro camino que seguir con las movilizaciones que ya anunciaron a finales del curso pasado y cuyo calendario incluye otras cuatro jornadas de huelga en noviembre (los días 27, 28, 29 y 30).
De esta forma y tras el conflictivo curso pasado, con tres días de huelga y numerosas movilizaciones en los centros, las centrales vascas inician el presente intensificando sus protestas, que afectan a unos 9.000 trabajadores y más de 100.000 alumnos. Además de secundar las huelgas convocadas, los sindicatos reiteraron la invitación a los trabajadores a no colaborar en las tareas de carácter voluntario en los centros mientras no haya una negociación “real” de sus condiciones laborales.
Portavoces sindicales volvieron a censurar ayer en la rueda de prensa que ofrecieron en Bilbao la actitud “inmovilista” de las patronales, que “ni siquiera” han convocado una mesa de negociación, lo que, a su juicio, evidencia su “falta de disposición” negociadora. Además de a las patronales, los sindicatos pidieron “responsabilidad” para solucionar el conflicto al Gobierno Vasco, teniendo en cuenta que parte de la financiación de estos centros es pública, vía módulo concertación.
En el Presupuesto de 2018, el Gobierno Vasco contempla cerca de 670 millones de euros exclusivamente para la concertada, un 33% de todo el presupuesto. Hay que tener en cuenta además que Euskadi es la única comunidad que financia los niveles no obligatorios de 0-3 años y Bachillerato (65 millones y 107 millones de euros en 2017). Junto a la financiación ordinaria vía concierto, los centros reciben dinero de convocatorias a las que se presentan (contratos de especialistas de apoyo, sustituciones Irale, proyectos de normalización lingüística, innovación, convivencia, FP?).
La representante de ELA Miren Zubizarreta comparó el sector con una “subcontrata barata” del Gobierno Vasco, en la que “los paganos” son los trabajadores. Ayer volvieron a recordar que el colectivo lleva casi 10 años sin renovar el convenio, acumulando una pérdida de poder adquisitivo superior al 10%, mientras que soporta cargas de trabajo “insostenibles” al correr a cargo de las plantillas cuestiones como la digilitalización de las pedagogías y la innovación educativa.
Volvieron a advertir de que el descenso de la natalidad está repercutiendo en los centros, con despidos en los primeros cursos de Educación Infantil, ante lo cual han reclamado un acuerdo para el mantenimiento del empleo para recolocar al personal afectado por el previsible cierre de aulas. Para los sindicatos, se trata de “un problema acuciante en los próximos años”, que se podría abordar mediante jubilaciones parciales del personal mayor para procurar la recolocación de los trabajadores afectados por el eventual cierre de aulas.
Por otro lado, CCOO Irakaskuntza instó ayer al Gobierno Vasco a que reconsidere su rechazo a la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) en favor de denunciar la segregación escolar en Euskadi y posibilite su tramitación en el Parlamento Vasco. CCOO llamó la atención sobre la circunstancia de que “Euskadi no presenta buenos números” si se tiene en cuenta un reparto de matriculación “prácticamente similar” entre las dos redes educativas existentes, la pública y la privada-concertada.
De esta forma, en situación de práctica igualdad, la red concertada vasca, sin embargo, solo atiende al 39% del alumnado becario, al 32% del alumnado extranjero y al 40% del alumnado con necesidades educativas especiales; el resto es atendido por la escuela pública. Esos datos son inferiores a los que en términos porcentuales le correspondería cubrir al ámbito concertado, que, no obstante, cobra una media de 1.315 euros al año a las familias en cuotas de enseñanza, frente a los 400 euros de la red pública. A juicio de la central sindical, la segregación escolar tiene como consecuencia “una desigual distribución del alumnado en las escuelas y colegios, en función de alguna característica”, como la situación socioeconómica de las familias, su pertenencia a un grupo étnico-cultural o el rendimiento académico previo del alumnado. - I. A.
Kristau Eskola. Es la asociación que mayor número de colegios concertados integra. En total, Kristau Eskola agrupa 135 colegios religiosos en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa en los que trabajan 8.000 profesionales de la enseñanza, entre docentes y personal de administración y servicios. Estudian 90.000 alumnos.
AICE/IZEA. La Asociación Independiente de Centros Educativos (AICE) / Irakaskuntza Zentruen Elkarte Autonomoa (IZEA) es una organización profesional del sector educativo y formativo que reúne, en estos momentos, 46 colegios privados y concertados de la Comunidad Autónoma de Euskadi. Fue fundada en 1984 como una de las patronales de la enseñanza en Euskadi.