El Gobierno español aprobará, en el Consejo de Ministros del próximo martes, un real decreto-ley con medidas para incrementar la robustez del sistema eléctrico después del apagón peninsular del 28 de abril, tanto a nivel de operación como para reforzar las vulnerabilidades identificadas en el ámbito de la ciberseguridad.

El paquete, que el secretario de Estado de Energía, Joan Groizard, ha presentado a los grupos parlamentarios, parte de las medidas contempladas en el informe del comité investigador con las que se busca, por ejemplo, mejorar las capacidades para el control de tensión y la protección contra las oscilaciones del sistema.

Según el informe conocido esta semana, el inédito episodio se produjo por un problema de sobretensión con "origen multifactorial": el sistema tenía una capacidad de control de tensión insuficiente, hubo oscilaciones que condicionaron la operación y se desconectaron instalaciones de generación, en algunos casos, de modo aparentemente indebido.

Que "todos los agentes" cumplan

En rueda de prensa, la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, explicó que las propuestas se englobaban en ocho bloques de actuación, desde el punto de vista de la operación del sistema, y en tres desde la ciberseguridad y los sistemas digitales.

La primera -"fundamental" para la ministra- es el refuerzo de la supervisión y la verificación del cumplimiento de las obligaciones "por parte de todos los agentes del sistema", sobre todo de las asociadas al control de tensión y factor de potencia.

Para ello se plantea el análisis del cumplimiento de la normativa aplicable por parte de los órganos competentes en inspección, instrucción y, en su caso, sanción, no sólo de lo ocurrido el día del incidente, sino con carácter más amplio.

También regular el régimen jurídico de las infraestructuras comunes de evacuación, instalaciones que no son ni red de transporte ni de distribución, sino una red privada de los generadores hasta llegar al punto frontera en el que, finalmente, se conectan.

Por último, acelerar la constitución de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), en trámite parlamentario, como organismo regulador y supervisor especializado y focalizado exclusivamente en el sector energético, a la vista de su "elevada complejidad" y "necesidad de mayor supervisión y transparencia".

Reforzar el control de tensión

   Precisamente, el documento urge a implementar la revisión normativa que permitirá a las tecnologías renovables controlar la tensión en la red eléctrica igual que las fuentes convencionales, y establece penalizaciones por incumplimiento de las obligaciones que siguen siendo aplicables a los grupos síncronos.