bilbao - De la sorpresa y el asombro inicial se ha ido subiendo en el escalafón social por los diferentes grados de indignación, cabreo, repulsa hacia una resolución de libertad que, aunque sea legal y bajo coste económico es percibida por la inmensa mayoría de la sociedad como una flagrante injusticia. Al propio hecho de libertad condicional se suma como índice multiplicador de repulsa la argumentación que realizan los magistrados. Es difícil entender para las personas con las que hemos hablado, y para la mayoría de las que se expresan en las redes, que estos delincuentes condenados no vayan a intentar huir y mucho menos que su comportamiento con las mujeres vaya a ser beatífico por el mero hecho de ser conocidos. La experiencia más bien induce a pensar lo contrario, que como Manada se autoampararán en el grupo jaztándose y muy posiblemente volverían a repetir algún atropello sexual contra cualquier mujer.

Este era el pensamiento de las miles de mujeres, y también hombres aunque todavía menos, que se manifestaron ayer por las capitales de Euskal Herria contra la decisión de la Audiencia de Navarra de conceder la libertad condicional bajo fianza a los cinco miembros de La Manada condenados a nueve años de prisión por abusar sexualmente de una joven en los Sanfermines de 2016.

Convocada por los movimientos feministas y asociaciones de mujeres de Euskadi a través de las redes sociales, la ciudadanía vasca volvió a responder para protestar contra “una Justicia patriarcal que protege a los violadores frente a las víctimás”.

En Bilbao, al igual que el pasado mes de abril cuando se conoció la sentencia, la marcha se concentró ante los juzgados con lemas como “No a la cultura de la violación. “Nosotras te creemos”. Entre el estruendo de silbatos se corearon frases como “no es un caso aislado, se llama patriarcado” o el “gora borroka femiista” (Arriba la lucha feminista). El momento álgido de la marcha fue cuando las convocantes llegaban al ayuntamiento y se topararon con una pareja de recién casados que aplaudieron la marcha, mientras las manifestantes les aplaudían con fervor. Allí leyeron un comunicado y emplazaron a las mujeres para el próximo jueves, a las 7,30 en la plaza Unamuno

También en Donostia, cientos de personas se reunieron en torno al quiosco del Boulevard, citadas por el colectivo Donostiako Mugiendu Feminista donde desplegaron una pancarta con el lema en euskera “Ante los ataques sexistas, solidaridad feminista”, tras las que varios intervinientes desplegaron banderas moradas..

La concentración de protesta contra el fallo judicial comenzó en Vitoria-Gasteiz a las ocho de la tarde en la plaza de la Virgen Blanca, el mismo lugar donde el viernes nada más conocer la sentencia se llevó a cabo la primera movilizaciión.

“¡No es no. Justicia! fue el lema de la pancarta que encabezó la protesta, llevada a cabo por los colectivos feminista Andra y Lunes Lila en Iruñea. Una pancarta desplegada por mujeres con guantes rojos que simbolizan¡ las manos de ese color que desde hace unos años evidencian el rechazo a las agresiones sexistas en la Comunidad foral de Navarra.

En Iruñea, al igual que en el resto de las capitales vascas, los manifestantes exhibieron carteles con leyendas que rezaban “Jueces incompetenes, deleznables”. “Mi vida tiene valor”, “Leyes retrógradas, obsoletas, denigrantes, absurdas y sin sentido”.

Las conentraciones tuvieron un denominador común: la transversalidad de las mismas. Estudiantes, adolescentes, señoras de edad... alzaban la voz al unísono contra “un caso que no es aislado, sino fruto de una justicia patriarcal”, indicaban Ane, Leyre, Isabel y Nerea, adolescentes recién llegadas de viaje de estudios de Cádiz que no daban crédito a la sentencia. “Nos enteramos por las redes sociales y nos quedamos patidifusas. Hay que apoyar a la víctima,porque podríamos haber sido cualquiera de nosotras”, decían frente al Palacio de Justicia de Bilbao.

Para Iñaki, jubilado de 71 años, que pasó 13 meses en la cárcel juzgado por los tribunales franquistas por haber impulsado la creación del sindicato LAB, “el problema es que desde el 78 no se ha depurado la Judicatura y hay unos jueces rque legislan contra la población. Si solo fuera por esto ya merece la pena manifestarse”, subrayó a DEIA, este bilbaino consciente de que el auto lo han hecho coincidir con el Mundial de Rusia.”Han aprovechado el fútbol para minimizar el efecto”, sentenció