Madrid - El Gobierno español puso ayer fin a las bolsas de plástico ligeras que todavía se entregan de forma gratuita en numerosos comercios, un envase muy dañino desde el punto de vista ambiental por su baja reutilización y porque se dispersan como basura fácilmente debido a su reducido peso. Los consumidores tendrán que pagar a partir del próximo 1 de julio por cada bolsa de plástico que reciban, aunque sean las más pequeñas y ligeras, algo ya generalizado para las bolsas de plástico más grandes.

Se trata de una medida transitoria, porque en el año 2021 estas bolsas (las ligeras) estarán completamente prohibidas, salvo que estén fabricadas con material compostable.

El Consejo de Ministros dio luz verde a la directiva comunitaria para reducir el impacto medioambiental de los envases y de sus residuos.

Las bolsas de plástico se clasifican, según su peso, en tres grandes categorías: las “muy ligeras” (menos de 15 micras) que se utilizan por lo general para productos de higiene, frescos o a granel como frutas, carne o pescado; las “ligeras” (menos de 50 micras) que se entregan de forma gratuita en muchos comercios; y las “gruesas” (más de 50 micras) por las que los comercios ya cobran una pequeña cantidad pero que se suelen reutilizar con frecuencia.

El Decreto establece que a partir del 1 de julio se cobrarán todas las bolsas, pero exceptúa las “muy ligeras” y las “gruesas” recicladas, aunque a partir de 2021 estas bolsas (las “ligeras” y las “muy ligeras”) también estarán prohibidas salvo que sean compostables. Obliga también a que las bolsas más gruesas deberán contener al menos un 50% de plástico reciclado y quedarán prohibidas todas las que sean de plástico fragmentables.

La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina incidió en que el Gobierno quiere “una naturaleza libre de residuos plásticos” porque el 90% de estas bolsas -dijo- se utilizan una sola vez y tiene una vida útil de entre 12 y 25 minutos aunque tardan entre 100 y 500 años en descomponerse.

En el marco de la Estrategia de Economía Circular, el Gobierno de Mariano Rajoy diseñará una “hoja de ruta” específica para el plástico, detalló la ministra. La titular de Medio Ambiente advirtió de que las bolsas de plástico están entre los diez residuos más abundantes en los mares y océanos y repercuten muy negativamente en sectores como el pesquero o el turístico. El Decreto aprobado ayer contempla la realización de campañas de sensibilización y formación. Las bolsas de plástico más ligeras provocan graves problemas de contaminación en el medio ambiente y agravan el acuciante problema de la presencia de residuos plásticos en los mares y océanos.

Este tipo de bolsas ligeras, las más consumidas, se reutilizan con menos frecuencia que las bolsas grandes y por lo tanto se convierten en residuo más rápidamente, además de que tienden a dispersarse como basura con más frecuencia debido a su reducido peso. La ministra de Medio Ambiente alertó de que entre 5 y 13 millones de toneladas de plástico terminan cada año en los océanos. - Efe