vitoria - Departamento de Educación y sindicatos acercaron ayer posturas en la Mesa de Docentes pero no se produjeron los avances necesarios para cerrar un acuerdo. Así, ambas partes se han emplazado a una nueva reunión el próximo 4 de mayo. Todos los sindicatos consideraron “insuficientes” y “carentes de concreción” las nuevas propuestas que el Gabinete que dirige Cristina Uriarte llevó a la trascendental reunión de ayer. No obstante, las opiniones emitidas al término del encuentro llevan a pensar que todos los sindicatos -excepto ELA- están dispuestos seguir explorando la vía del diálogo para intentar poner fin al conflicto laboral en la escuela pública vasca.

Únicamente el sindicato liderado por Txiki Muñoz se mostró partidario de poner fin al aplazamiento de la semana de huelga desconvocada por las tres centrales abertzales y continuar con la dinámica de movilizaciones que este curso ha alcanzado su cota máxima. Steilas y LAB, por su parte, no descartaron esta posibilidad pero antes valorarán con su afiliación la nueva propuesta del Gobierno Vasco. Entre las mejoras que se suman a la oferta en la Mesa del 27 de enero, el Departamento de Educación destacó las dirigidas a reforzar el personal de las aulas de tres años con más de 20 estudiantes, crear plazas para labores administrativas en los centros de Infantil y Primaria y ampliar licencias y permisos.

Además, se apuesta por nuevas dotaciones de personal para la euskaldunización de la Formación Profesional, por desarrollar un índice de necesidades educativas para apoyar a las aulas que más lo precisen y por el desarrollo de actuaciones para el cobro del 100 % del complemento en supuestos de incapacidad temporal.

Reacciones Para Steilas, la nueva oferta “requiere un desarrollo posterior, unas concreciones y un calendario de aplicación”. En opinión del sindicato mayoritario entre el colectivo docente ha quedado claro que el Gobierno Vasco dispone de recursos suficientes por lo que dejó “la pelota en el tejado” del Gabinete Uriarte para resolver el conflicto y “aplicar los recursos que necesita la escuela pública”.

En la misma línea, Aitor Núñez (LAB) dejó claro que su central “contempla todos los escenarios posibles” aunque reconoció que hubo “nuevos contenidos” en la reunión. Pablo García de Vicuña (CCOO) dijo que las “expectativas iniciales son buenas” pero exigió al Departamento que la negociación se tome “en serio” porque algunas de sus propuestas contienen aspectos que “aun chirrían”.

Tal y como se preveía, ELA fue el sindicato más crítico ya que según su portavoz en la mesa, Miren Zubizarreta, la reunión fue “absolutamente decepcionante” porque respondió a una “estrategia de apariencia de negociación por parte del Gobierno Vasco”, frente a la que ELA apuesta por mantener las movilizaciones. UGT piensa que las propuestas de Educación son “un avance” aunque faltan “aspectos importantes” como la estabilidad de los sustitutos de más de 55 años con cinco de antigüedad (un colectivo de 1.050 docentes) y la reducción de la interinidad, para lo que reclama que las fases de OPE no sean eliminatorias y se simplifiquen los exámenes.

La viceconsejera de Administración y Servicios, Olatz Garamendi, salió del encuentro satisfecha porque las conversaciones con los sindicatos, a su juicio, “están dando sus frutos” y permiten “seguir concretando propuestas y avanzando” hacia el acuerdo. No obstante, reconoció que las centrales censuraron falta “concreción” en algunas de las propuestas presentada. Tras la reunión de dos horas y media, la viceconsejera explicó que se ha planteado la posibilidad de incorporar personal para la gestión administrativa de las aulas de educación Infantil y Primaria. Por otra parte, afirmó que se han ofrecido mejoras en materia de “estabilidad” laboral.