mungia - El día después del temporal y de la crecida del río Butrón en las cuencas de Mungialdea fue algo más tranquilo para sus residentes. En la localidad mungiarra, las incidencias más reseñables se limitaron a la parte baja del municipio, ubicada muy próxima a al paso del río , en concreto a la calle Lauaxeta, donde varios garajes y lonjas se vieron anegadas por el agua procedente de la subida del Butrón de la noche anterior. El uso de motobombas permitió achicar la mayoría del agua durante la mañana de ayer.
Begoña, una de las propietarias de estos garajes, explicaba que fue a las doce de la noche del jueves cuando se percató de que el río ya estaba “desbordado”. Y al superar la altura de los seis metros, “rápidamente el agua llegó hasta mi garaje, que está ubicado por debajo del nivel del Butrón”. “Intentamos sacar el agua con las motobombas y por fortuna durante la mañana de hoy -por ayer- hemos podido sacar agua, si bien todavía queda algo, porque estas máquinas no tienen muchas capacidad”. La bajada del nivel del Butrón y el respiro que dieron las precipitaciones durante la jornada de ayer hicieron más fácil la extracción de gran parte del agua.
Gatika fue otra de las localidades afectadas por las crecidas del jueves. El río Butrón llegó hasta las viviendas de varios de los vecinos de la zona. Los propietarios de una caserío, que se encuentra construido al lado de la cuenca, fueron testigos de cómo el caudal desbordado llegaba hasta el rodapié de la puerta de su casa. “Estamos habituados a estas subidas del río. Cuando caen cuatro gotas se desborda y como el jueves llovió bastante, nos ha llegado hasta la entrada de casa. Ahora estamos limpiando el lodazal con palas a mano. Al final tuvimos suerte y el agua entró solo un poco, alcanzando medio metro de altura”, explicaba esta vecina, con aparente resignación. Según relataba, su seguro privado se hará cargo de los desperfectos que, por suerte para ella y su marido, no “fueron excesivos”, señaló.
En lo que respeta a la comunicación por carretera, los viales BI-2120 entre Mungia y Plentzia y la salida 19 de la BI-631, que tuvieron que ser cortadas al tráfico el día anterior, quedaron abiertas a los vehículos desde primera hora de ayer. Por su parte, la carretera BI-634, a su paso por Gatika, y que permanecía cerrada desde la 1 de la madrugada, quedó reabierta al tráfico sobre las 8.30 horas. - Patxi Arostegi