DONOSTIA. Estos datos han sido facilitados esta mañana por la directora de estos ciclos estivales, Carmen Agoués, quien ha hecho un balance de esta edición en la que se ha vuelto a batir un nuevo récord en cuanto a número de asistentes y de actividades programadas.
En total, han pasado por la presente edición de los cursos, que arrancó el pasado 7 de junio y finaliza hoy, un total de 12.346 personas -10.684 alumnos y 1.662 profesores-, lo que supone un incremento del 1,6 %, mientras que las actividades celebradas han sido 181, una más que en 2016.
La directora de esta universidad veraniega ha destacado la "variada programación" y la actualidad de los temas tratados en la presente edición en la que se han analizado asuntos tan dispares y candentes como la transexualidad infantil, el poder de Google, la eficiencia energética o la ciberdelincuencia.
Agoués ha recordado que el centro neurálgico de los Cursos de Verano es el Palacio Miramar de Donostia, aunque también se organizan actividades en diferentes localidades como Hendaia, Baiona y San Juan de Luz.
Ponentes destacados como Ángel Gabilondo, Rafael Santandreu, Juan Manuel de Prada, Javier Sádaba, Javier Urra, Jorge Tizón, Begoña Ibarrola, Mikel Ayestaran, Maialen Lujanbio, Espido Freire, Santiago Muñoz Machado, Adela Asua y Miguel Rodríguez-Piñero han pasado por la presente edición de los cursos en la que, un año más, el índice de satisfacción es muy alto -un 8,30 por parte del alumnado y 9,54 del profesorado-.
Los datos han sido desgranados por el subdirector de los ciclos, Igor Álvarez, quien ha subrayado la importante presencia de alumnos extranjeros, que suponen ya el 12 % del total.
La mayor presencia del euskera y también del inglés y el francés es otra de las cuestiones destacadas desde la organización de estos Cursos de Verano que, por primera vez, ha realizado un estudio de impacto económico apoyado en datos de la pasada edición.
De esta manera, se estima que en el País Vasco esta actividad tiene un impacto económico total de 2.714.438 euros -1.071.241 directo y 1.634.197 indirecto-, además de crear 32 empleos.
Según este estudio, el ingreso neto generado para las administraciones públicas vascas, una vez descontadas las ayudas otorgadas, asciende a 75.186 euros ya que éstas otorgan subvenciones por importe de 477.500 euros para la organización de los cursos que, a su vez, reportan vía impuestos a estas mismas instituciones 552.686 euros a través del IRPF o el IVA con lo que estos ciclos reportan más dinero público del que reciben.
Todo ello sin contar los 336.794 euros que aportan también a las arcas del Estado a través de la Seguridad Social, han explicado sus promotores.
Los Cursos de Verano de la Universidad del País Vasco preparan ya la edición del 2018, cuyo plazo para recibir propuestas para ciclos presenciales se abrirá ya el próximo 9 de octubre.