Alicante - Agentes de la Policía Nacional investigan la muerte de un niño de 8 años. Las primeras investigaciones apuntan a dos personas que cubrían sus rostros con cascos de moto y a los que se les vio abandonando el lugar de los hechos: una vivienda en Elda (Alicante). En el momento de producirse este suceso, el menor se encontraba en presencia de la novia de su padre, que está embarazada de 4 meses.
Los agentes desplazados hasta el lugar encontraron maniatada a la mujer, de 30 años, con contusiones y con una bolsa en la cabeza. Aunque en un primer momento se barajó la posibilidad de una posible agresión sexual, el testimonio de la víctima y las pruebas médicas practicadas fueron garantía para descartar esta agresión.
El suceso se produjo sobre las 21.00 horas del pasado miércoles cuando la mujer y el niño bajaron de su domicilio, situado en el número 26 de la calle Don Quijote de la localidad alicantina de Elda, y fueron asaltados por unos hombres que ocultaban su identidad con cascos. Ambos sujetos obligaron a la mujer y al niño a subir con ellos de nuevo a la vivienda. Al parecer, fueron llevados a habitaciones distintas por lo que ella no pudo ver qué ocurría. Se da la circunstancia de que la joven es sorda por lo que tampoco pudo escuchar.
Una vecina alertó al 112 tras entrar en la vivienda al escuchar ruidos y ver la puerta entreabierta. Al llegar los servicios sanitarios, encontraron al menor semidesnudo en el suelo y en parada cardiorrespiratoria y no pudieron hacer nada por reanimarlo. Por su parte, la mujer, que está embarazada, fue localizada maniatada en una silla, con la cabeza cubierta por una bolsa de plástico y con diversas contusiones. Fue trasladada hasta el hospital de Elda, donde recibió el alta pasada la medianoche, precisaron fuentes de la Conselleria de Sanidad.
El padre del menor, que regresó a su domicilio después de ser alertado por la Policía, tuvo que ser reducido por los agentes que se encontraban en su vivienda tras sufrir un ataque de ansiedad. Al conocer los hechos comenzó a golpearse por lo que se optó por reducirlo para evitar que se autolesionase. El hombre tenía la tutela del menor -con autismo, según algunas informaciones-, al parecer en régimen de acogida. La Policía explicó que la investigación está abierta y no descarta ninguna hipótesis.
Tal y como recogía ayer la publicación Valle de Elda, el jefe de la Policía Local, Francisco Cazorla, manifestó que “hasta que no esté la autopsia no se pueden adelantar las causas exactas del fallecimiento del menor, pese a las numerosos rumores que están circulando entre los medios de comunicación respecto a las circunstancias de la muerte del niño”. - DEIA/E.P.