Madrid - Dos nuevos casos de violencia machista sacudieron ayer las localidades de Getafe y Torrevieja En el municipio madrileño, un hombre de 71 años se entregó en la comisaría diciendo que había matado a su mujer, que fue hallada muerta con varios golpes en la cabeza en el domicilio que ambos compartían. El hombre, de nacionalidad española, llegó a las 5.10 de la madrugada a las dependencias policiales para comunicar que había matado a su mujer, María Raquel Castaño Fenoll, de 63 años y también española. Los agentes se desplazaron a la casa comprobaron que la mujer había fallecido y presentaba varios golpes en la cabeza. Según las fuentes policiales, el agresor tenía dos antecedentes por malos tratos en 2011 y 2012, si bien no consta que tuviera o hubiera tenido orden de alejamiento.
De confirmarse que la muerte es consecuencia de una episodio de violencia de género, se trataría de la primera víctima mortal que se produce este mes agosto. De ser así, con la mujer fallecida este martes ascenderían a 33 las víctimas mortales a consecuencia de la violencia machista en lo que va de año.
catana Por otro lado, un joven de 25 años y nacionalidad colombiana fue detenido ayer en Torrevieja, acusado de haber intentado matar con una catana, con una hoja de 21 centímetros de longitud, a su compañera sentimental, una compatriota de 44 años, quien sufrió profundas heridas en el brazo y hombro.
La llamada de una amiga de la pareja, que se encontraba en ese momento en la vivienda, fue determinante para salvar la vida de la víctima de la agresión.
El presunto agresor, al que se le imputan los presuntos delitos de homicidio en grado de tentativa y lesiones por estos hechos, sucedidos la pasada madrugada, ya fue arrestado “el pasado mes de marzo por otra supuesta agresión a su pareja”.
En aquel caso, la Guardia Civil “procedió de oficio al acudir la víctima al hospital para ser atendida de los hematomas que presentaba”. Sin embargo, según el instituto armado, “durante la celebración del juicio rápido, la mujer no quiso formular acusaciones contra su pareja, por lo que la sentencia fue absolutoria”.
En esta ocasión, el hombre ha sido detenido otra vez, acusado de haber agredido de nuevo a su compañera sentimental con una catana. Al llegar la patrulla al domicilio, la amiga de la víctima que había llamado estaba esperándoles y, al abrir la puerta de la vivienda, los agentes pudieron ver cómo un joven sujetaba a una mujer en el pasillo. Ambos estaban cubiertos por abundante sangre y, al percatarse de que se había abierto la puerta y entraban los agentes, el varón se separó rápidamente de la mujer. - Efe