Valle de Ayala - En los dos últimos años, el Valle de Ayala ha visto cómo sus sistemas de abastecimiento de agua mejoraban gracias a los 2,8 millones de euros invertidos en la renovación de las infraestructuras hidráulicas de la comarca por la Diputación Foral de Álava y el Consorcio de Aguas Kantauriko Urkidetza (CAKU), en el que también está representado el ente foral.
Un ejemplo de esta positiva evolución se halla en la ya culminada reparación de los depósitos de Llodio, Amurrio y Artziniega -370.000 euros- o en la construcción de uno nuevo, de 3.250 metros cúbicos de capacidad, en Lejarzo. Instalación que garantizará el abastecimiento de Amurrio a largo plazo y cuyo presupuesto, de 410.742 euros, incluye las posibles averías e incluso los casos de incendio. Mejoras a las que se sumará, tras una inversión de 900.000 euros que prevé finalizar en diciembre, la renovación del bombeo y conducción desde el río Altube hasta la Estación de Tratamiento de Aguas Potables (ETAP) de San Bartolomé, en Llodio.
Asimismo, se ha remodelado la instalación eléctrica y de control de la ETAP de Artziniega, incorporándola al sistema de telemando por 152.523 euros, y se han dado pasos para mejorar tanto el suministro a la cabaña ganadera -como son las ya terminadas obras de mejora del bombeo y canalización para Sierra Salvada con una inversión de 178.047 euros-, como a las zonas más rurales, como es el caso de las obras de abastecimiento de Artomaña, que han supuesto un desembolso de 480.867 euros.
olor y sabor Otro proyecto ya adjudicado por un importe de 307.137 euros y cuya culminación está prevista para el mes de agosto, es el que hace referencia a las obras necesarias para eliminar los olores y sabores en las Estaciones Depuradoras de Agua Potable de Izoria, Luiaondo y Llodio, pertenecientes al sistema de abastecimiento de Maroño.
Y es que, según explican los responsables del CAKU, “la zona que se abastece del sistema Maroño suele presentar, al final de la época estival y en el caso de que el período haya sido seco, problemas de olores y sabores derivados fundamentalmente del crecimiento de la población de algas en el embalse”. Ello, no obstante, no afecta a las características sanitarias del agua, ya que éstas “cumplen con lo prescrito por la normativa de calidad de agua de consumo”, afirman.
millones. A lo largo de los últimos dos años, la Diputación y el Consorcio de Aguas Kantauriko Urkidetza han invertido 2,8 millones en la mejora de las infraestructuras.