París - El ministro francés de Agricultura, Stéphane Le Foll, anunció ayer que para tratar de controlar la contaminación de la gripe aviar se van a sacrificar todas las aves de granja del departamento de las Landas, el principal centro de producción de patos del país, donde quedan unos 600.000.
Le Foll justificó esta medida radical porque “el virus ha progresado del este al oeste” del departamento de las Landas e insistió en que el objetivo es “tratar de estabilizar” la situación. “Ya sacrificamos muchos patos en la parte este del departamento, queda una zona en la cual vamos a sacrificar todos los patos para tratar de estabilizarla”, declaró el ministro francés de Agricultura en una entrevista radio-televisada por RMC y BFMTV.
Se pretende llevar a cabo una “acción de profilaxis de forma general y poder a continuación reanudar la producción”, señaló en otra entrevista a la emisora France Bleu Gascogne, en la que habló de un plazo de “varias semanas”.
La decisión del Gobierno va en la línea de lo que habían solicitado los ganaderos, que en una reunión del Comité Interprofesional de Palmípedos el jueves pasado habían solicitado un refuerzo d e la estrategia de lucha contra esta enfermedad, que se había declarado en Francia en noviembre pasado.
El ministro recordó que no hay vacuna contra la gripe aviar y que los protocolos han mejorado respecto a la anterior crisis de 2016. Desde que se identificó la presencia del virus H5N8 de la gripe aviar a finales de noviembre en Francia, adonde llegó de la mano de aves migratorias, se han sacrificado más de 3 millones de patos -de acuerdo con los datos actualizados hasta comienzos de la semana pasada-, lo que significa un 8 % de la producción nacional.
Francia suele sufrir episodios similares casi todos los años, lo que afecta al foie gras, uno de los productos estrella de la gastronomía gala. El brote fue detectado a principios de diciembre, por lo que las exportaciones navideñas tuvieron que ser canceladas ya que Francia no pudo recuperar el estatuto de ‘libre de influencia aviar’.
Las autoridades francesas ya emprendieron el pasado mes de enero un sacrificio masivo de patos para contener el virus, lo que no ha evitado que el número de granjas afectadas haya crecido.
Transmisión a los humanos Por otra parte, a pesar de que en las últimas semanas ha aumentado considerablemente el número de casos y de muertes por la gripe aviar H7N9 en China, por ahora no se ha podido comprobar que haya contagio sostenido humano a humano, aseguró ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El portavoz de la entidad, Christian Lindmeier, indicó que los contagios se deben a contactos con las aves infectadas y que son estas las que transmiten el virus. Dicho esto, admitió que hay tres grupos de personas que han tenido contacto entre si (clusters) y que han resultado infectadas por lo que “las autoridades no han podido descartar el contagio entre ellas”.
Sin embargo, Lindmeier volvió a repetir que el hecho de que no se pueda descartar el contagio humano a humano no quiere decir que se haya producido, por lo que reiteró que éste por ahora no se ha comprobado. - Efe
