Compostela - El fuego parece haber dado una tregua en Galicia y los montes de la provincia de Ourense, los más afectados en las últimas horas, recuperan la calma después de que haya quedado estabilizado el incendio en Melón y controlado el de A Pobra de Trives, al igual que el de Cervantes, éste último en Lugo. Asimismo, fue dado de alta el operario herido leve por intoxicación de humo en el incendio, ya extinguido, en el término de Sarreaus (Ourense), que ingresó ayer en observación.

Las llamas se han apoderado en esta primera quincena de agosto en Galicia de montes singulares, muchos de diferentes núcleos rurales que han estado en riesgo por la cercanía del fuego, y han quedado arrasadas miles de hectáreas de pinares y eucaliptos. Los equipos de extinción parece que poco a poco ponen cerco al fuego y en las últimas horas han logrado estabilizar el incendio de la parroquia de Quins, en el término orensano de Melón. Este fuego ha afectado a 106,58 hectáreas, de ellas 84,93 de monte raso y 21,65 de arbolado, según el último parte facilitado por la Conselleria de Medio Rural.

Los brigadistas también han conseguido aislar y mantener controlados en las últimas horas los incendios de Navea, en A Pobra de Trives (Ourense), y de San Tomé, en Cervantes (Lugo). El primero de estos, controlado desde las diez de la noche del lunes, afecta a 194 hectáreas, 174 de ellas de monte raso y el resto de arbolado. También está controlado el incendio en la parroquia de San Tomé, en el municipio lucense de Cervantes, en este caso desde las siete de la mañana de ayer. Allí el fuego arrasó 30 hectáreas. Además, fueron extinguidos los incendios de Arbo (Pontevedra), parroquia de Mourentán, que afectó a 1.717 hectáreas, y el de la parroquia de Albeos, en el municipio pontevedrés de Crecente, que quemó 354 hectáreas. Según los últimos datos oficiales, también han sido extinguidos los incendios de San Millao, en Cualedro (Ourense), que afectó 435 hectáreas, y los de las parroquias de Baroña, Xuño y Caamaño, en Porto do Son (A Coruña), con 1.600 hectáreas afectadas. Por otro lado, un nuevo incendio forestal se activó ayer por la tarde en el término municipal de Lalín, en la provincia de Pontevedra. El fuego comenzó en la parroquia de Vilanova a las 17.02 horas y afecta a alrededor de 20 hectáreas.

Hoy, tras semanas de intenso calor, un frente poco activo, cruzará la Comunidad gallega de oeste a este. Así, se espera una jornada de cielos cubiertos, con lluvias débiles que comenzarán por la mañana y que se irán trasladando cara el sureste. - Efe