Bermeo - El fuego no da tregua a Bizkaia en este inusual invierno. Recién apagados los rescoldos del incendio que afectó a Berango y Sopela, en esta ocasión otras aparatosas llamas calcinaron ayer cincuenta hectáreas de zona forestal en Bermeo. Las llamas afectaron especialmente a Matxitxako, parte de un biotopo protegido en el que el medio centenar de bomberos de las bases de Artaza, Gernika-Lumo y Derio movilizados desde las 5.30 horas debieron de emplearse a fondo para extinguir las llamas. Sin que generara daños de gravedad a los caseríos, cuyos vecinos tuvieron que ser desalojados, la hipótesis apunta que el origen “está en una zona en la que una línea eléctrica ha tocado el arbolado de eucalipto”, según determinaron desde la Diputación Foral de Bizkaia.
El día fue ayer largo en Bermeo. Muchos fueron los vecinos que se despertaron viendo como al norte, en el horizonte que dibuja el cabo Matxitxako, las llamas hacían la luz en medio de la oscuridad. Fueron las horas más intensas, ya que el fuerte viento reinante -con rachas de hasta 111 kilómetros a la hora, sobre todo en dirección noroeste- hacía presagiar que las llamas propagadas en varios frentes, avanzarían con rapidez por la franja costera. Originado a la par del islote de Akatz, fue ganando terreno hacia el faro de Matxitxako. Medio centenar de personas, entre bomberos, personal del departamento foral de Agricultura y voluntarias de Protección Civil de Bermeo, trabajó a destajo en esas primeras horas. A las tareas de extinción se sumó, pasadas las 10.30 horas, un hidroavión FOCA del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente proveniente de la base madrileña de Torrejón de Ardoz.
El aparato apenas realizó varias pasadas por la zona descargando agua, pero ayudó sobremanera en que las llamas fueran perdiendo fuerza. Y las primeras labores de los efectivos en tierra resultaron cruciales, ya que se consiguió detener el avance y, lo que es más importante, que no afectara a la planta que Enagas posee en el cabo bermeotarra. Con una carretera BI-3101 que enlaza Bermeo y Bakio que actuó casi como un cortafuegos, proteger las instalaciones en tierra de la plataforma gasística de la Gaviota era uno de los objetivos.
Esa tarea se solapó con la protección de los caseríos diseminados que se encuentran en las inmediaciones. “La rapidez con la que se ha actuado ha permitido contener las llamas sin que las viviendas cercanas ni la central de gas que se halla en las inmediaciones hayan resultado afectadas”, tal y como apuntaron fuentes forales. Tanto la carretera antes mencionada como la BI-4203, que llega hasta las instalaciones del faro de Matxitxako, tuvieron que ser cortadas al tráfico durante buena parte de la jornada.
A pesar de que el viento siguió soplando con fuerza, el fuego fue aminorando su voracidad. Tanto es así que para las 11.00 horas el incendio estuvo bajo control. “Había cuatro viviendas que defender de las llamas, así como la central de gas, que está aquí cerca. La rapidez con la que se ha actuado ha permitido contener el fuego sin que pase al otro lado de la carretera y, gracias a ello, no ha habido incidencias en las viviendas”, evidenciaba a esas horas el jefe del servicio foral de Montes, Carlos Uriagereka.
Sin embargo, los bomberos y los retenes formados se mantenían alerta ante al posibilidad de que las llamas se avivaran. “Desde el primer momento se han desplegado todas las dotaciones para hacerse con el control del fuego”, aseguró, por su parte, el diputado general, Unai Rementeria, que se acercó al lugar de los hechos a primera hora de la mañana.
No fue hasta las 17.00 horas de la tarde cuando la Diputación activó la fase final de control del incendio. Para las 19.30 horas, los equipos sobre el terreno acabaron con los últimos focos y dieron por extinguido el incendio. Aún así durante todo la noche se han quedado dos retenes “en tareas de vigilancia y remojo, con el objetivo de controlar que no se reaviven los focos” . Además, la presencia de las primeras lluvias en la zona pasadas las 20.00 horas empezaron a mojar el suelo calcinado que aún estaba humeante.
nuevos focos en Berango Además a media tarde la alarma saltó de nuevo en Berango cuando el fuego del pasado lunes se reavivó en dos focos como consecuencia del fuerte viento reinante, informa Carlos Zarate. Según indicaron fuentes de los Bomberos de Diputación, dos dotaciones con autobombas se trasladaron a los puntos donde los rescoldos se habían convertido en llamas y procedieron a extinguir el fuego ya que su extensión no era demasiada. Uno de los puntos reactivados se encontraba al lado de una de las casas que el pasado lunes estuvo muy cerca de las llamas en Berango. Fuentes forales aseguraron, una vez apagados los focos, que “al registrarse el fuego en zonas quemadas el riesgo existente no era excesivo”.