AMURRIO. La Ertzaintza ha informado hoy de que el pasado mes de febrero la mujer trató de vender diversos objetos alegando que un familiar se los había regalado, en concreto un reloj, un par de pendientes y un anillo de oro, valorados en 500 euros.

Ante las sospechas de que su origen fuera ilegal los agentes iniciaron una investigación para determinar si las joyas habían sido regaladas por el familiar como afirmaba la sospechosa.

En las investigaciones se descubrió que la sospechosa realizaba trabajos de limpieza en una vivienda de Amurrio y tras contactar con la propietaria de la misma, ésta reconoció que las joyas pertenecían a un familiar suyo y que habían sido robadas aprovechando un descuido.

Ante tales evidencias los agentes procedieron ayer al arresto de la sospechosa acusada de un delito de hurto.