vitoria - El Departamento vasco de Educación no va a realizar finalmente la primera ‘reválida’ establecida en la ‘ley Wert’ a los 21.000 escolares de 3º de educación Primaria. En su lugar, el Gabinete de la consejera Cristina Uriarte va a llevar a cabo a final de curso una prueba piloto de la evaluación sobre una pequeña muestra escolares de 8 años de 30 centros públicos y concertados, es decir, en menos del 6% de los 534 colegios de educación Primaria que hay Euskadi. Fuentes del Departamento han confirmado a DNA la decisión de posponer hasta 2016 la generalización de esta evaluación que no tiene ningún efecto sobre el expediente académico del alumno, sino que tiene como objetivo orientar al profesorado sobre su nivel.
De esta manera el Ejecutivo Urkullu sortea este curso la aplicación del contestado examen de la reforma educativa del Partido Popular, tal y como ha hecho con la implantación en setiembre de los Programas de Formación Transitoria Integrada (PFTI), la alternativa vasca a la nueva Formación Profesional Básica. Tal y como ha podido saber este periódico, el Departamento de Educación ha tomado de testar primero la evaluación de 3º no solo para organizar mejor la prueba, sino para saber cómo reaccionan a ella los escolares a una edad tan temprana. La prueba experimental que se desarrollará probablemente en mayo será diferente a la que marca la ley, aprovechando que el Ministerio de Educación deja en manos de las comunidades autónomas su desarrollo.
Concretamente, la Lomce introduce en 3º de Primaria una evaluación que busca conocer “el grado de dominio de las destrezas, capacidades y habilidades” de los niños y niñas de 8 años “en expresión y comprensión oral y escrita, calculo y resolución de problemas”. La prueba vasca, en cambio, será más rica. Y es que, además de matemáticas y lengua castellana medirá el dominio de los escolares en euskera e inglés así como la competencia científica. En vez de las orientaciones que ya ha remitido a los centros el Instituto Nacional de Evaluación Educativa, en Euskadi será el Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa (ISEI-IVEI) el encargado de diseñar y remitir a los centros los ítems que los centros educativos deberán usar para evaluar a sus estudiantes en 3º y 6º de Primaria.
Fuentes consultadas han confirmado a este periódico que las evaluaciones previstas en la Lomce van obligar a modificar el calendario de actividad del ISEI-IVEI para no sobreexponer a los estudiantes a una sucesión extenuante de pruebas internas (exámenes del curso) y externas (Evaluación Diagnóstica y PISA). Así, el Departamento de Educación ha tomado la decisión de hacer coincidir la Evaluación Diagnóstica que el ISEI-IVEI viene realizando desde el curso 2008-2009 en 4º de Primaria y 2º de Educación Secundaria Obligatoria con las evaluaciones Lomce de 3º y 6º de Primaria. De esta manera, los estudiantes vascos solo se someterán a las evaluaciones internas y externas que fija la Lomce (3º, 6º de Primaria y 4º de ESO, 2º de Bachillerato -conducentes al título-) y el Informe PISA que la OCDE realizada cada dos años entre el alumnado de 16 años.
Novedades en el Currículum Vasco El hecho de que las evaluaciones vascas en 3º y 6º de Primaria se hayan ‘enriquecido’ con la medición de las competencias que hasta ahora venía analizando la Evaluación Diagnóstica ISEI-IVEI posibilita al Gobierno Vasco seguir conociendo la evolución del alumnado en cuando a la adquisición de las competencias básicas, con el fin de facilitar a los centros docentes una información suficiente y relevante que les sirva para organizar las medidas y necesarias dirigidas a mejorar la atención al alumnado y a garantizar que alcance las correspondientes competencias básicas, así como a valorar y reorientar, si procede, las actuaciones desarrolladas en cursos anteriores. Aso sí, con este esquema el seguimiento de Secundaria se quedaría algo huérfano a no ser que el Gobierno Vasco corrija este hueco en un futuro.
Por otro lado, la revisión de los decretos del Currículum Vasco que adaptan la Lomce a Euskadi tras recibir cientos de aportaciones por parte de los distintos agentes educativos también incluye novedades respecto a las evaluaciones y reválidas previstas en ella. Al finalizar el 4º de ESO, el alumnado que haya pasado limpio el curso debe realizar una evaluación individualizada para obtener el graduado, imprescindible para pasar a Bachillerato. En caso de no aprobar dicha reválida, la Lomce no da ninguna alternativa al estudiante. Únicamente establece que el centro expedirá un certificado oficial. Según el Departamento el Currículum Vasco incluye un curso adicional para pasar al prueba y obtener el graduado oficial.