BARCELONA. El hombre, un policía municipal en excedencia de 45 años y que había protagonizado ya varios incidentes públicos, fue atacado ayer por tres leones cuando, vestido con un uniforme militar de camuflaje, entró en la zona reservada a estos animales ante la atónita mirada de los visitantes del parque.
El sorprendente suceso ha generado un cierto debate en Barcelona acerca de si las medidas de seguridad del Zoo son las adecuadas, no tanto por el riesgo de que los animales puedan escapar de las zonas acotadas para ellos, sino por la facilidad con la que el "intruso" pudo colarse en el área de los leones tras saltar unas vallas.
La dirección de BSM (Barcelona Servicios Municipales), la empresa municipal que gestiona el zoo barcelonés, ha admitido la necesidad de analizar el sistema de seguridad, a la vez que ha defendido la actuación de los trabajadores del parque para intentar alejar a los leones de la víctima por medio de chorros de agua y extintores.
En este sentido, diversas fuentes han indicado que el lanzamiento de dardos anestésicos a los animales se descartó porque su acción no es inmediata y podría haber provocado que los animales hubieran reaccionado poniendo aún más en peligro la vida del hombre al que ya tenían entre sus garras.