BILBAO. Las tasas más elevadas corresponden al grupo de edad de niños de hasta 4 años con 274,3 casos, por delante del grupo de 5 a 14 años con 153 casos por 100.000 habitantes.

En función de los datos ofrecidos por la Red de Médicos Vigía, una red que se activa anualmente para la vigilancia de la gripe estacional y que está compuesta por 38 médicos de Medicina General y 11 pediatras, los análisis microbiológicos realizados confirman que los aislamientos de gripe son del virus A.

Desde el inicio de la temporada se han registrado 18 casos graves de personas hospitalizadas por gripe, de las que el 55,6% son mujeres. Por edad, la media es de 42,5 años.

En concreto, se trata de tres niños y una niña con edades de 0 a 4 años, una niña del grupo de entre 5 y 14 años, un varón y tres mujeres de entre 25 y 44 años, dos hombres y cuatro mujeres de entre 45 y 64 años, un varón y una mujer del grupo de 65 a 74 años, y un hombre mayor de 74 años. De estos 18 casos, en 12 de ellos factibles de vacunación y el 50% no había recibido la vacuna.

En cuanto a las consultas atendidas en Atención Primaria por síndrome gripal en la semana 52, la última de 2013, se han atendido un total de 1.436 consultas, un 49,3% más que la semana anterior. Por territorios, la mayor tasa se registró en Gipuzkoa, con 78,96 casos por cien mil habitantes. Le sigue Bizkaia con 69 casos y Alava con 26,7 casos por cada 100.000 habitantes.

Ante este "incremento importante" de la tasa de casos, Osakidetza ha anunciado que está habilitando toda su infraestructura hospitalaria para poder ingresar a aquellas personas que lo necesiten por complicaciones derivadas por gripe.

PROTEGERSE ANTE LA TOS Y EL ESTORNUDO

Desde el Departamento de Salud, se recomienda que, ante cualquier síntoma gripal, se acuda al médico de familia y se siga sus recomendaciones.

En este sentido, ha recordado que la gripe es una enfermedad vírica, por lo que no está indicado tratarla con antibióticos. Se trata de un enfermedad "molesta, pero benigna en la población sana" y que no tiene tratamiento específico.

Por ello, las principales recomendaciones son reposo, ingesta de abundantes líquidos y antitérmicos para atajar la fiebre. En el caso de que la fiebre persista, es necesario consultar con el médico.

Debido a su alto índice de transmisión y contagio, es importante adoptar medidas higiénicas precautorias como protegerse frente a la tos y el estornudo, lavarse frecuentemente las manos o utilizar pañuelos desechables.