Madrid. La Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (Anecpla) ha alertado del riesgo de legionelosis producido por los sistemas de nebulización de agua en bares y terrazas si no se revisan, tal y como establece la normativa.

"En estas fechas, son aún más necesarias las revisiones periódicas, preventivas y correctoras encaminadas a mejorar diversos aspectos como la seguridad, la salubridad e higiene de las instalaciones con riesgo de dispersión de legionella. Por ello, las instalaciones que tengan torres de refrigeración, equipos de aerosolización, pulverización y nebulización de agua destinados al confort térmico o para la conservación de los alimentos deben permanecer especialmente alerta durante la época estival", destacó la directora general de Anecpla, Milagros Fernández de Lezeta.

Y es que, la legionella, extendida en ambientes acuáticos naturales, sobrevive en los espacios húmedos y se ha convertido en un riesgo para todos los edificios que posean torres de refrigeración, sistemas de distribución de agua caliente sanitaria, condensadores evaporativos o sistemas de aerosolización o pulveración del agua, considerados como potenciales amplificadores de esta bacteria y diseminadores de legionelosis.

De hecho, cada año se registran en el Estado español una media de 45 brotes de legionelosis, especialmente ante la llegada de las altas temperaturas del verano, que hace que haya más casos y aumente la letalidad de los registrados en el ámbito hospitalario, los llamados casos nosocomiales, dado que se encuentran en una situación que los hace más vulnerables. Además, según los últimos datos de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica, relativos a 2011, un 11,1% de los casos registrados en hospitales acabaron falleciendo a causa de esta enfermedad.

Obligados a desinfectar Por todo ello, y con el fin de evitar posibles brotes o contagios, la Anecpla ha insistido en que el Real Decreto 865/2003, de 4 de julio, obliga a los propietarios y usuarios a realizar un tratamiento de limpieza y desinfección previo a la puesta en funcionamiento de toda instalación que haya estado parada más de un mes. Según el presidente de la Sociedad Española de Sanidad Ambiental, José María Ordóñez, los titulares de las instalaciones tienen que ser conscientes que son los responsables de las mejoras estructurales y funcionales de las instalaciones, así como el control de la calidad microbiológica y físico-química del agua.

La asociación de empresas de control de plagas reclama un aumento de medidas preventivas y de los programas de mantenimiento durante estos meses, además de un mayor control de las inspecciones por parte de la Administración en aquellas instalaciones con riesgo de dispersión de legionella, y el endurecimiento de las sanciones para, así, evitar posibles brotes.

En los últimos años, el progresivo aumento de las temperaturas ha impulsado, además, la proliferación de equipos que nebulizan agua en ambientes exteriores destinados a proporcionar confort térmico a las personas y a la humidificación de los alimentos durante el almacenaje o exposición.

En este contexto, las asociaciones empresariales, entre ellas Anecpla, y diversas consejerías de Sanidad han elaborado un documento dirigido a las empresas para prevenir la legionella en estos sistemas y evitar así que puedan suponer un riesgo para la salud de la población.

Por último, la asociación informó de que las medidas preventivas van encaminadas fundamentalmente a evitar aquellas condiciones que favorecen la colonización, multiplicación y dispersión de legionella como, por ejemplo, temperaturas adecuadas para su crecimiento (de 25-45 grados centígrados y especialmente en presencia de suciedad), estancamiento del agua, acumulación de sustratos o de productos que sirven de alimento para la bacteria.

Asimismo, y además de la limpieza, Anecpla recordó que la desinfección de las fuentes ambientales contaminantes sigue siendo la principal medida de control empleada. También aconsejó a aquellas empresas o centros que precisen los servicios de prevención y control de la legionella que sean "extremadamente exigentes" a la hora de elegir a los profesionales y a las empresas contratadas.