MADRID. Los ecologistas han desplegado varias pancartas en la que se leía "Iberdrola, enemigo de las renovables" y varios escaladores han colgado una de 240 metros cuadrados en el edificio, aunque ésta ha sido desmontada por trabajadores de la empresa, ha informado Greenpeace en una nota de prensa.
Iberdrola "ataca" a las energías renovables para proteger su negocio de "energía sucia", y utiliza sus influencias políticas para lograr una legislación favorable a sus intereses, según la organización ecologista.
Esta empresa ha pasado "de ser líder mundial en renovables a convertirse en su peor enemigo", ha manifestado José Luis García, responsable del Área de Energía y Cambio Climático de Greenpeace.
A su juicio, la presión de Iberdrola contra las renovables en España "está cerrando el camino a quienes quieren que nuestro país recupere el liderazgo y el empleo que tuvo en este sector".
La organización ecologista ha señalado que en un contexto de crisis económica, el sector renovable, además de contribuir a paliar los efectos del cambio climático, es una importante fuente de empleo que debería ser impulsado.