madrid. Los casos de violencia contra menores han aumentado en 2012 un 13,6% con respecto al año anterior, según un informe presentado en el Día Internacional de la Lucha contra el Maltrato Infantil por la fundación ANAR, que ha detectado cinco casos graves al día a través de las llamadas recibidas. En concreto, la Fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo) atendió en 2012, según explicó su director, Tomás Laguna, y el director de programas, Benjamin Ballesteros, a 1.778 niños y adolescentes víctimas de la violencia, de entre las más de 300.000 llamadas recibidas.
Llamadas que se registraron en el teléfono de la fundación ANAR en 2012, como la de un niño de 13 años, que fue atendido por un psicólogo, que afortunadamente le consiguió arrancar que era víctima de maltrato físico. "Cuando me pegan cierro los ojos y el dolor se va. Cuando sea mayor me voy a vengar...", le comentó el chaval. Otro chico de 15 años confesó al especialista que le atendía a través del otro lado del hilo telefónico que hace más de diez años que no se reía en casa. Era víctima también de maltrato físico y psicológico.
"Me dicen que qué voy a hacer por ahí si nadie me quiere en el mundo y que, por lo menos, ellos me dan techo, agua y luz. Tengo los huesos débiles de tantos golpes... al menos, me dejan comer. Estoy harto, no he tenido infancia, ni adolescencia, ni nada", se lamentaba.
Es, en toda regla, una confesión del dolor desgarrador que estaba sufriendo, un testimonio que los psicólogos consiguen que el menor deje de silenciar "escuchándole sin prisa, dándole tiempo para transmitirle la calma y la tranquilidad necesaria para que cuenten lo que les ocurre". Y sobre todo, creyendo lo que les pasa, según Benjamin Ballesteros, director de programas de la fundación, que presentó ayer el informe del pasado año, que refleja que la violencia contra los menores ha aumentado un 13,6% con respecto a 2011.
El tercer testimonio que da ejemplo del sufrimiento de estos menores es el de una chica de 16, a quien le jugó una muy mala pasada la práctica conocida como séxting, el envío de mensajes o fotos subidas de tono a través del móvil. "Cometí el error -admitía- de enviar una foto mía desnuda a mi novio. Lo hice porque no paraba de insistir y, claro, yo no quería perderle. Ahora que ya no estoy con él, ha mandado esta foto por whatsapp a los chicos de mi clase... ¿sabes lo que es eso?. Ir al instituto es ir al infierno, quiero desaparecer...". Pero hay otros tipos de violencia, como la del abuso sexual, situaciones tan duras como las que sufría una niña de nueve años y cuya hermana mayor llamó a la fundación para contar lo siguiente: "Mi hermana pequeña duerme con un palo en la cama porque tiene miedo de que aparezca mi padre en cualquier momento".
víctimas violencia machista La última y quinta llamada de entre las más de 300.000 que recibió la fundación el año pasado fue la una chica de 17 años. Con esa edad ya ha sido víctima por violencia de genero. "He pasado toda la noche sin dormir, no quiero seguir así. Estoy embarazada de tres meses. Hace un mes, tras una bronca, él me encerró en su casa sin dejarme salir, me subió por las escaleras arrastrándome. He querido dejarle, pero él me amenaza con matar a toda mi familia. No sé que hacer, ¿esto es un maltrato?", se preguntaba. Del tipo de esta última llamada se registraron en la fundación 122, menores víctimas de la violencia de sus parejas o exparejas. Estos son algunos de los ejemplos de la violencia ejercida contra los menores, pero solo en 2012 la fundación detectó 1.778 casos graves, cinco al día. La fundación ANAR ofrece desde 1994 una línea gratuita que opera las 24 horas del día, el 900202010 en la CAV, que registró 28.409 consultas telefónicas durante el pasado año, la tercera comunidad con más llamadas tras Castilla y León y Madrid.