vitoria. Aprovechando la celebración del bicentenario de la batalla de Vitoria, el Ayuntamiento se ha propuesto que el deteriorado y polémico monumento -inamovible para unos, un estorbo para otros- de la Virgen Blanca luzca bonito. Y para ello va a gastar 2.400 euros, un desembolso que en gran parte viene del alquiler de la plataforma necesaria para la limpieza (1.383 euros). El lavado de cara comenzó ayer y consiste en eliminar la pintura, vegetación, excrementos de palomas... para que, al final, la piedra enseñe su color original. Foto: alex larretxi