Vitoria. Parece que de momento no se va a tomar ninguna medida para paliar la pérdida de alumnos de los euskaltegis. Los centros de alfabetización de adultos tendrán que hacer frente con sus propios medios al arranque del curso escolar, que tendrá lugar la semana que viene, ya que el Gobierno Vasco ha pedido una semana más para estudiar los datos de la última campaña de matriculación, que evidencian una bajada superior al 20%.
Por lo tanto, los euskaltegis empezarán las clases prácticamente con una cuarta parte menos de alumnos que en años anteriores. "Son los peores datos de nuestra historia", aseguraba ayer la coordinadora general de AEK, Mertxe Mujika, nada más salir de la reunión que mantuvieron los centros con el Gobierno Vasco. El área de Blanca Urgell les había convocado en San Sebastián a una reunión de urgencia para analizar la situación del sector y adoptar medidas. Sin embargo, no obtuvieron ni un sólo compromiso por parte del Ejecutivo vasco -que no quiso hacer declaraciones-, salvo que estudiará los datos aportados por los euskaltegis durante una semana más. El próximo encuentro será el 8 de octubre.
La lectura que hacen los centros es clara. "Las medidas que haya que tomar a partir de ahora para promocionar el euskera dependerán otra vez de nosotros ya que el Gobierno Vasco sigue con la misma actitud que ha mantenido los últimos años", añadió Mujika. Más allá de la crisis, que sin duda ha podido influir en el retroceso de la matrícula, los euskaltegis denuncian la falta de apoyo por parte del Ejecutivo para aprender euskera.
Varios han sido los hechos que sostienen su afirmación. Por un lado, el pasado año se eliminaron las ayudas económicas que concedía Lakua a aquellos alumnos que lograban aprobar el perfil lingüístico. En concreto, se daban 500 euros al acreditar el nivel 1; 400 euros para el nivel 2, y 100 euros para los niveles 3 y 4, respectivamente. Asimismo, la financiación de los euskaltegis ha ido cayendo gradualmente durante la legislatura de Patxi López, pasando de los 44,9 millones de euros en 2009 a los 41 millones de 2012. Otro factor que explicaría la fuga de alumnos de estos centros de alfabetización de adultos es la entrada en vigor del decreto de exenciones, que exime a aquéllos que han estudiado Bachillerato en modelo D de acreditar el perfil B2, lo mismo que ocurre con los que han cursado la carrera en euskera, que no tendrán que presentar el certificado C1, equivalente al EGA.
Además, los euskaltegis tampoco pasan por alto el trato que ha recibido la lengua vasca por parte del Gobierno autonómico en las últimas OPE. "El euskera ha ido perdiendo prestigio y al mismo tiempo se ha perdido la motivación por aprender esta lengua", apunta Mujika. En este sentido, denuncian la política lingüística mantenida durante años que es, a su juicio, lo que ha desencadenado esta situación. "Es verdad que estamos viviendo una crisis pero también es cierto que el camino tomado por la Administración nos ha traído hasta aquí", añaden desde AEK
Así las cosas, los euskaltegis consideran que a pesar de que están a punto de comenzar las clases todavía hay tiempo para introducir medidas correctoras, como podría ser la reducción de los ratios de alumnos por aula, de tal forma que se permita crear una clase con menos estudiantes -ahora tiene que haber un mínimo de nueve alumnos-. "Todavía hay tiempo para flexibilizar algunas condiciones y hacer frente así a toda la demanda", señalan. Entre tanto, los centros aseguran que intentarán hacer un esfuerzo para aceptar al mayor número de alumnos posibles y evitar así el despido de trabajadores. En cualquier caso, coinciden en que ha llegado el momento de abrir el debate en torno a la gratuidad del aprendizaje de euskera.