DONOSTIA. Según la sentencia del caso, a la que hoy ha tenido acceso EFE, el procesado había descargado estos contenidos de internet, "para su propio uso", en un disco duro en el que guardaba cerca de 120 archivos con este tipo de material, así como en un disco compacto con otros cuatro vídeos de pornografía infantil.
La resolución judicial explica que "no ha quedado acreditado" que estos contenidos hayan sido puestos "a disposición de terceras personas" a través de internet, ya que "ha sido imposible el análisis pericial del ordenador portátil del acusado, por avería física de su disco duro".
Durante el juicio por estos hechos, el encausado se mostró conforme con la petición de condena realizada por el fiscal, por lo que ahora ha sido condenado a cuatro meses de cárcel como responsable de un delito de corrupción de menores en su modalidad de tenencia de pornografía infantil para su propio uso.
