Vitoria. El Grupo de Prevención y Apoyo (GPA), nueva unidad especial de la Policía Local de vitoria, extiende sus horizontes. Con la intención de ampliar su eficiencia, la Jefatura de Agirrelanda ha decidido reforzarla con agentes femeninos, una idea que ha sido recibida con satisfacción por parte de los agentes y de los sindicatos. Sin embargo, los portavoces del sindicato ErNE han lamentado que, nuevamente, se cometen errores a la hora de materializar estas buenas intenciones. En esta ocasión, los responsables policiales han decidido incorporar a las interesadas conforme al criterio de antigüedad, una alternativa que, a juicio del sindicato, supone un agravio comparativo con todos aquellos miembros del colectivo que hace sólo tres meses tuvieron que superar pruebas físicas para poder incorporarse al grupo.
Tal y como reza la escueta nota informativa, firmada por el comisario jefe, por la que se regula la "ampliación de agentes femeninos en el Grupo de Prevención y Apoyo", el próximo 4 de julio se cerrará el plazo para que las voluntarias interesadas en incorporarse a la unidad lo comuniquen en secretaría. "Se atenderá conforme al criterio de antigüedad en el servicio y la fecha de inicio en el nuevo destino será el día 16 de julio de 2012", agrega la circular. Se descarta cualquier otro proceso de selección, por lo que desde ErNE se ha manifestado que "nuevamente se saltan la igualdad, el mérito y la capacidad".
Mala organización Los portavoces sindicales pusieron como ejemplo de la "mala organización interna" que vive el cuerpo un suceso acaecido el pasado día 14, cuando el responsable del turno de noche llevó a comisaría de Agirrelanda a un detenido por desobediencia. De los dos agentes adscritos a la inspección de guardia de aquel día, uno había solicitado la jornada libre -y se la habían concedido- y el segundo había pedido horas sindicales a Función Pública -que también se le concedieron-. Sea como fuere, el máximo responsable del turno vio que no había nadie en dicha sección y trasladó al detenido a la comisaría de la Ertzaintza, "con la consiguiente sorpresa por parte de los ertzainas". Lo que ErNE no comprende es "porqué este responsable pasó por alto que en su turno tenía a los compañeros de atestados para realizar las gestiones que tuvo que hacer la Ertzaintza cuando están perfectamente capacitados para ello":