SAN SEBASTIÁN. Los hechos sucedieron en la tarde de ayer, cuando un indigente encontró al bebé en el interior de una bolsa de plástico, abandonado en una iglesia de la capital donostiarra.

Sobre las 19:15 horas, este hombre cogió al niño y se lo entregó al personal de seguridad de una estación de ferrocarril próxima, desde donde fue alertada la Ertzaintza.

El bebé fue atendido en el servicio de neonatología de Osakidetza, aunque aparentemente presentaba buen estado de salud.

Los agentes iniciaron una investigación que les llevó a localizar a la madre, una mujer extranjera que recibe ayuda de una asociación benéfica y que declaró que había abandonado a su hijo porque no disponía de recursos para atenderlo.

Por este motivo, la Ertzaintza ha imputado a la mujer un delito de abandono de menores.