El número de personas que se engancha a las nuevas tecnologías crece a velocidad de vértigo. Un estudio ha revelado que en China un 42% de los internautas ha generado adicción a la Red o que un 18% de los estadounidenses no puede vivir sin estar conectado una media de seis horas al día. Es más, en países como Argentina existe el grupo denominado Viudas de Internet en el que cientos de mujeres se reúnen para hacer terapia, consolarse y hablar de cómo su relación peligra ya que sus parejas prefieren pasar horas y horas navegando antes que estar con ellas.
Aunque pueda resultar cómico y estas cifras no se ajusten a la realidad vasca, los especialistas advierten de que cada vez atienden más casos de este tipo en sus consultas, especialmente a gente joven. Se calcula que en Euskadi en torno al 5% de la población tiene adicción a las nuevas tecnologías, es decir, invierte más de siete horas en Internet o haciendo uso del teléfono móvil. La incidencia es mayor entre los adolescentes, en concreto en chicos de entre 14 y 17 años.
Así lo ha constatado la Asociación Alavesa de Jugadores en Rehabilitación (Asajer), que en los últimos años ha registrado un incremento de consultas de este tipo. Los juegos en red, los móviles y especialmente las redes sociales son los principales motivos por los que acaban acudiendo a terapia. "Cada vez atendemos a más casos, es una realidad, pero tampoco es correcto hablar de un boom sino más bien de un goteo. En general, creo que todavía hay poca conciencia de este problema", asegura Ana Herrezuelo, psicóloga de la citada asociación.
A su consulta llegan sólo "los casos más extremos". La mayoría acuden obligados por sus padres y cuando se produce una situación de riesgo -acoso, insultos, contacto con un desconocido...-. "Lo que nos llegan son problemas muy asumidos, en el resto de los casos no se quieren adoptar medidas, la familia no se pone en marcha", añade.
Más de siete horas Pero, ¿qué se considera por adicción? La asociación cree que un joven abusa de las nuevas tecnologías cuando emplea en ellas más de cuatro horas diarias, mientras que si se superan las siete ya habría que empezar a hablar de una adicción. Sin embargo, este problema nunca llega solo. Cuando alguien depende tanto del ordenador suele repercutir en otras facetas de la vida, como en los estudios. La adicción también tiende a dañar la relación con la familia y los amigos. "Hay chavales que dejan de ir a clase, abandonan sus aficiones y también sus relaciones sociales", explica Herrezuelo.
Cuanto más tarde se detecta esta dependencia más difícil suele ser que el tratamiento resulte eficaz, más incluso que cuando se trata de curar una ludopatía. "La tecnología es algo vital, no puedes abandonarla definitivamente, por lo que poco a poco hay que aprender a usarla de forma responsable", aseguran desde Asajer. A fin y al cabo, el uso del ordenador y de la Red es hoy en día prácticamente una necesidad tanto para trabajar como para comunicarse, de ahí que resulte tan complicado desengancharse de este tipo de herramientas. Básicamente, el tratamiento consiste en buscar alternativas a la tecnología para relacionarse, encontrar otro tipo de aficiones y trabajar también con la familia. "Ésta se suele ver muy deteriorada, hasta el punto de que pueden producirse comportamientos violentos", añaden.