vitoria. Arrecia la tormenta dialéctica desatada entre la Asociación de Vecinos Iparralde-Zaramaga y el Ararteko con la implantación de la mezquita como telón de fondo. A la institución liderada por Íñigo Lamarca no le han sentado nada bien las críticas vertidas por los integrantes del colectivo vecinal y, en términos más comedidos que los empleados por éstos, sus portavoces han precisado que aún no se ha dictado resolución alguna con respecto al templo y que se les informará debidamente cuando su opinión esté formada y trasladada a papel. Aprovechan, eso sí, para explicar a la agrupación que siempre han trabajado "desde la imparcialidad y la independencia, lo cual no significa equidistancia ni inhibición ante los problemas sociales".
Una vez constatada la distancia que separa al Ararteko de la postura vecinal -que rechaza la implantación de una mezquita pese a que ésta tiene todos los papeles en regla-, el escrito difundido ayer por la oficina del defensor ciudadano puntualiza que "esta institución no ha dictado aún la resolución conclusiva de dicho expediente de queja", si bien aclara que "lo haremos en los próximos días".
En este sentido conviene recordar que el malestar de los vecinos tuvo como origen un hipotético dictamen ya elaborado en el que el Ararteko, supuestamente, censuraba la actuación del Ayuntamiento de Vitoria por entorpecer el emplazamiento de la mezquita en la calle Martín Olave. Los integrantes de Iparralde-Zaramaga hicieron público su malestar por el hecho de que Lamarca difundiera su contenido sin antes haber informado a las partes en conflicto. Los vecinos tacharon este comportamiento de "sectario" y recordaron al Ararteko que su trabajo se debe en primer lugar al ciudadano "y es a éste al que debe rendir cuentas". Subrayaron, además, su descontento con el presunto contenido del dictamen, al señalar que "sus palabras, sus frases, tienen una cierta coincidencia con discursos progresistas". Por último, instaban a Lamarca a ocupar una postura "neutral" en este litigio y le exigían una disculpa.
Tras confirmar que el dictamen al que aluden los miembros de la plataforma vecinal no existe por el momento, los portavoces del Ararteko aseguraron que "una vez concluida, remitiremos la resolución al Ayuntamiento de Vitoria y a diferentes entidades, entre otras a la Asociación de Vecinos Iparralde-Zaramaga, y la haremos pública a través de nuestra página web". A modo de conclusión, el comunicado de la oficina explica que "las actuaciones de la institución del Ararteko se ciñen escrupulosamente y siempre a los dictados del ordenamiento jurídico, interpretándolo y aplicándolo conforme al criterio de la mejor salvaguarda de los derechos humanos, según nos obliga la Ley en calidad de alto comisionado del Parlamento Vasco para la defensa de los referidos derechos".