santander. La secretaria de Estado de Igualdad, Bibiana Aído, llamó ayer a las víctimas de violencia machista, a su entorno y a toda la sociedad a "actuar, denunciar y no permanecer impasibles" frente a una "lacra social que golpea al país con especial virulencia". Aído se pronunció así a propósito del último caso ocurrido esta semana en Almería. La secretaria de Estado, que participó en un foro del PSOE sobre igualdad, condenó el suceso y trasladó toda su solidaridad a los familiares y amigos de las víctimas, al tiempo que aprovechó para insistir en la "necesidad" de que "se abran puertas al sistema de protección". Aído señaló que es "muy importante" que tanto las mujeres que están sufriendo la violencia machista como su entorno, amigos y familiares, "que conocen que se están produciendo este tipo de situaciones", den "un paso adelante", denuncien y llamen al teléfono 016 que, según recordó, es "gratuito, anónimo" y la llamada "no deja huella". También animó a acudir a las organizaciones de mujeres y a los servicios sociales.
En este sentido, la secretaria de Estado reconoció el papel que deben jugar las instituciones, pero también el entorno de las víctimas. "No podemos permanecer callados cuando vemos cómo una compañera de trabajo o una amiga, una y otra vez dice que se ha tropezado con un mueble o ha resbalado en la bañera y sabemos que eso no es cierto", insistió. A su juicio, no se puede "permanecer de brazos cruzados" pues existe "la responsabilidad de actuar" frente a un problema con el que se puede "acabar". Así, apuntó que hay que ser "conscientes" del camino recorrido en los últimos años, en los que se ha conseguido sacar la violencia de género del "ámbito privado" para hacer de ella una "causa compartida del conjunto de los ciudadanos y de las instituciones".
Aído admitió que el indicador de las víctimas mortales "es muy doloroso", pero recalcó que "no puede ser el único indicador", lo mismo que al evaluar el Código Penal o el Sistema Nacional de Salud no solo se tienen en cuenta el número de delitos o la cifra de fallecimientos.
Al hablar de violencia sexista remitió a otros indicadores que "también son importantes y positivos", como el hecho de que haya 95.000 mujeres que forman parte de los programas de protección.