vitoria. El escolta privado que mantiene una huelga de hambre desde el 16 de agosto para pedir una reducción de jornada pidió ayer a su empresa de seguridad-Sabico- que actúe "de buena fe", como ordenaron los jueces, y le recoloque en un servicio "que se adapte en la medida de lo posible a la vida de su hija".

Aunque el juez desestimó su petición de disminuir el horario de su jornada, "por las peculiares condiciones del trabajo", el magistrado pidió a la empresa que, se guiara "por el principio de buena fe" a la hora de organizar los servicios.

En este sentido, el empleado explicó al comité de empresa que aceptaría la propuesta de trabajar 15 días al mes en lugar de los 17 actuales, en el caso de que Sabico actúe de buena fe y le adjudique un servicio más tranquilo que el que tiene actualmente, en Vitoria, con jornadas de hasta 17 horas diarias.

Para hoy está previsto que el órgano de representación de los trabajadores se reúna con la citada empresa con el objetivo de estudiar el caso.