Maeztu. Tres municipios de Montaña Alavesa se han descolgado de la consulta popular convocada por la Plataforma contra la Línea de Alta Tensión celebrada el pasado domingo, lo que ha provocado un profundo malestar en el territorio navarro y entre los responsables de la asociación. Además, el representante del Ayuntamiento de Oion tampoco atendió debidamente el deseo de votar en la Junta de Labraza, a donde se tuvieron que llevar con urgencia las papeletas para la votación.

En un acto celebrado ayer en Pamplona se hicieron públicos los resultados de esta consulta, en la que, por parte de Montaña Alavesa, participaron los municipios de Campezo, Bernedo y Peñacerrada, mientras que en Maeztu, Valle de Arana y Lagrán no se llevó a cabo. Lo comunicaron a la plataforma el jueves anterior a la consulta a través del presidente de la Cuadrilla, José Ignacio Saenz Castillo. Su actitud sorprendió a los responsables de la agrupación, ya que su participación estaba confirmada y porque tampoco se dieron explicaciones sobre la razón por la cuál se retiraban.

De los tres municipios donde sí se celebró, el no fue rotundo, con 422 participantes en Campezo, 120 en Peñacerrada y 112 en Bernedo. Según las informaciones llegadas a la plataforma a través del portavoz Alberto Frías y trasladadas a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, en Bernedo no se facilitó la votación y los dos miembros de la Mesa utilizaron una sala de la Junta Administrativa para resguardarse y recibir los votos. La misma fuente señalaba que dos de las personas que no acudieron a votar fueron la alcaldesa de Bernedo y el presidente de la Cuadrilla de Montaña Alavesa.

Por su parte, el Ayuntamiento de Oion había designado un representante para estar presente en los encuentros de la plataforma y servir de cauce de comunicación con el núcleo de Labraza, ya que en las últimas semanas coincidió con un cambio en la presidencia de esa Junta Administrativa. Según confirmó la plataforma, el domingo no había papeletas ni material informativo en la sede social de esa localidad y se tuvieron que llevar urgentemente desde tierras navarras para que los vecinos pudieran ejercer su derecho al voto. En esa pequeña localidad acudieron a votar 70 personas, algunas de ellas censadas en Labraza, pero residentes en otros municipios por trabajo.

Para Frías, la situación es "muy grave" porque se ha roto la unidad de acción. Ésa es también la opinión de los responsables navarros, que ya mostraban una cierta inquietud desde que en diciembre se convocara una reunión de alcaldes en Campezo a la que sólo asistieron los de la zona navarra.

Ruptura Los acontecimientos de las últimas horas han provocado una pérdida de confianza en los compromisos de la comarca alavesa. De hecho, la plataforma no descarta plantear la ruptura entre las dos zonas para seguir en solitario como venían haciendo hasta el verano. Lamentan que hasta ahora, ellos se hayan llevado la peor parte, con manifestantes sancionados o la negativa de las autoridades forales a recibirles para plantear sus demandas.

Otros miembros de la plataforma sospechan que puede haber intereses ocultos y apuntan a los futuros parques eólicos de Valle de Arana y Maeztu, que necesitan la línea de alta tensión para evacuar la su producción. Ambos ayuntamientos forman parte, o están en fase de integrarse, en las empresas promotoras de dichos parques con el fin de incrementar el flujo económico en sus arcas municipales, por lo que ésa podría ser la razón de su salida de la consulta popular. El delegado de Red Eléctrica Española en la CAV confirmó que no ha mantenido ningún encuentro con estos alcaldes pero, previsiblemente, los promotores si lo habrán hecho con el Departamento de Acceso a la Red.