Pese a las evidentes restricciones de movilidad, algunas personas siguen necesitando utilizar su coche para ir al trabajo, hacer la compra o desplazarse hasta un centro de salud. Y pese a que nuestras salidas de casa son mínimas, no debemos perder de vista que estamos en primavera y, por tanto, algunos conductores están afectados por las alergias propias de este periodo del año.
En estos casos, si se va a conducir un vehículo a motor es importante que se sepa si el medicamento con el que se quiere hacer frente a la alergia supone algún riesgo a la hora de conducir, e incluso si se puede dar positivo en los test antidrogas que se realizan mediante una prueba de saliva (en función del tiempo que haya pasado desde su última ingesta y de la cantidad que se haya tomado).
Los siguientes medicamentos pueden dar positivo en un test antidrogas: Bromfeniramina (Ilvico), Bupropion (Zyntabac, Elontril), Clorpromazina (Largactil), Clomipramina (Anafranil), Dextrometorfano (Romilar), Difenhidramina (Bisolvon antitusivo compositum y otros), Doxilamina (Cariban, Dormidina y otros), Ibuprofeno, Naproxeno, Prometazina (Actithiol antihistamínico, Fenergan expectorante), Quetiapina (Seroquel), Ofloxacino (Surnox), Ranitidina, Sertralina, Tioridazina, Trazodona (Deprax), Venlafaxina y Verapamil.
Todos estos medicamentos pueden arrojar falsos positivos en un test, y concretamente pueden hacer saltar las alarmas de los medios que se disponen para controlar las anfetaminas, metilanfetaminas, metadona, opiáceos, fenciclidina, barbitúricos, canabinoides y benzodiacepinas.
Por lo tanto, si habitualmente tomas alguno de los medicamentos anteriores es necesario que valores si es realmente necesario que lo hagas o, por el contrario, los efectos de la alergia sobre tu organismo son tan graves que no te permitirán mantener la concentración en la carretera, debido a la irritación de los ojos, estornudos o toses, entre otros síntomas.
Algunos estudios señalan que el riesgo de accidente aumenta en un 30% cuando estamos afectados por una alergia y la Dirección General de Tráfico estima que estornudar cinco veces consecutivas a 90 km/h supone perder de vista la carretera durante más de 125 metros. Si esto mismo nos ocurre recurrentemente a 100 km/h, estaremos recorriendo 140 metros "a ciegas" en cada crisis de estornudos. Sin duda, en estos casos hay que tomar algún tipo de medicamento. Pese a ello, si formas parte de este último caso, es muy importante consultar el prospecto de cada fármaco que nos recetan. Hay que tener en cuenta que su uso puede tener efectos secundarios, como provocar sueño o dificultar que mantengas la concentración en la carretera.
En general, aquellos medicamentos que utilizan como principio activo bilastina, ebastina, desloratadina, loratadina y terfenadina no producen efectos sobre la conducción y son, por ello, mejores para la seguridad al volante.
A todo lo anterior hay que añadir que quienes sufren con mayor severidad los efectos de la alergia también presentan alteraciones del sueño. En concreto, se calcula que el 50% de los alérgicos no puede dormir correctamente, lo que influye en un mayor cansancio a lo largo del día. Además, el 40% de los que sufren rinitis alérgica también sufren importantes efectos en su metabolismo, afectados generalmente por somnolencia diurna.
En síntesis: primavera, alergias, medicamentos, vehículos a motor, conducción, falsos positivos en drogas y disgustos innecesarios.