En imágenes: Siete cuevas de Euskadi y Navarra que te dejarán con la boca abierta
Juan MIguel Ochoa de Olza | NTMEsta sencilla gruta se ha formado por los plegamientos geológicos que han coforado os Pirineos. Durante añois se ha udas como corral como refugio para el ganado. Para llegar a ella hay que salir de la Fábrica de Armas de Orbaizeta hasta el collado de Azpegui, en el límite con Francia y el cromlech del mismo nombre. Desde alli se toma a al derecha una pista asfaltada a muy estrecha hata una zona de bordas. Desde lejos se ve la cueva. Se puede visitar todo el año, aunque en epoca de lluvia y nieve hay que se muy prudente por el riesgo de resbalar.
Las cuevas suscitan en los humanos una fascinación que oscila entre el miedo a lo que pueda haber dentro y la necesidad de explorar lo desconocido. Son refugio y son fuente de leyendas. Son un espectáculo que no hay que ignorar.
Cueva de Arpea
N.T.M.
Esta sencilla gruta se ha formado por los plegamientos geológicos que han conformado los Pirineos. Durante años se ha usado como corral como refugio para el ganado. Para llegar a ella hay que salir de la Fábrica de Armas de Orbaizeta hasta el collado de Azpegui, en el límite con Francia y el cromlech del mismo nombre. Desde allí se toma a al derecha una pista asfaltada a muy estrecha hasta una zona de bordas. Desde lejos se ve la cueva. Se puede visitar todo el año, aunque en época de lluvia y nieve hay que se muy prudente por el riesgo de resbalar.
Cuevas de Zugarramurdi
Ondikol
Un clásico. Escenario de tradición brujeril y de la persecución del que fueron objeto los vecinos de este pueblo, ahora es una visita obligada para los amantes de las cuevas, al geología y las historias más oscuras de nuestro pasado.
Cuevas de Ikaburu.JPG
Ondikol
Las cuevas de Urdazubi Urdax son casi tan famosas como las cercanas de Zugarramurdi. Forman parte de una red de cavidades excavas por el río Urtxume y que comunican con Francia. En ellas se han encontrado abundantes restos prehistóricos, y se las considera el yacimiento del Paleolítico superior más importante de Navarra. Se han habilitado para poder ser recorridas y se realizan visitas guiadas.
Cueva de Mendukilo
Iñaki Porto
En la Sierra de Aralar se abren la cuevas de Mendukilo en la localidad de Astiz, en el valle de Larraun. Acondicionada para poder ser visitada sin peligro, los 800 metros de longitud recorren tres salas, Artzainzulo, enla entrada y que servía de refugio a los pastores; Laminosin, en la que las estalactita y estalactitas asombra a quienes las ven, y Herensugearen gotorlekua, la guarida del dragón. la más grande de las tres. Cuenta con dos salas más, la del Guerrero y la Galería del caballo, pero estas solo son accesibles dentro de un programa espeleoaventura.
Cueva de Ekainberri
Arnaitz Rubio
La Cueva de Ekain, Patrimonio de la Humanidad, oculta pinturas y murales prehistóricos en los que se contemplar hasta 70 figuras de animales. Está considerada como una obra excepcional del arte rupestre del paleolítico. Pero lo delicado de su estado ha hecho que para el público se abra la cueva de Ekainberri, en la guipuzcoana Zestoa. una réplica que se puede visitar. Pretende acercar el arte rupestre a todo el público.
Cueva de Arrikutz-Oñati
Rubén Plaza
Este sistema de cavidades de la cordillera de Aizkorriuna , son con sus mas de 15 km las más extensas de Gipuzkoa. Los descubrimientos paleontológicos realizados en ellas, fue de las primeras en ser exploradas, mostraron que fueron refugio para animales prehistóricos. Se han hallado huellas del paso de rinoceronte lanudo, hiena de las cavernas, ciervos gigantes, osos cavernarios y el esqueleto completo de un león de las cavernas. Se pueden realizar diferente vistas guiadas adaptadas al tipo de público, especialmente el infantil.
Cueva de Pozalagua
Sampedro
En la vizcaína Karrantza, en el mismo límite con Cantabria y en en Parque Natural de Armañón, se encuentra la cueva de Pozalagua, donde las estructura geológicas se alzan como protagonistas indiscutibles. Son las estalactitas excéntricas las que asombra al explorador. Es la mayor concentración de estas peculiares formaciones de Europa en las que cada una de ellas crece en cualquier dirección creando estructuras increíbles. Descubiertas casualmente en 1957 durante unas labores de minería, su importancia hizo que se modificasen los trabajos de explotación de la cercana cantera para protegerla y que a comienzos de la década de los años 70 del siglo pasado se cerrara definitivamente. Sus 125 metros de longitud y 4 simas gemelas de 40 metros de profundidad la convierte en un espectáculo único.
Cueva de Los Goros
Eloy Corres
Sin duda se trata de la cueva más popular de Álava. Las cinco bocas distribuidas en dos alturas que dan entrada a la caverna se encuentran a media hora andando de la localidad de Hueto de Arriba. Se le ha medido una longitud de dos kilómetros, pero únicamente los primero 250 metros se pueden visitar con normalidad y sin equipo de espeleología. Un pozo de 10 metros de profundidad corta el paso a los turistas. Otro de sus atractivos, y también gran riesgo es que fuertes lluvias puede causar avenidas de agua que inunda la sala y y se precipitan al exterior por las cinco bocas. Es la manifestación salvaje del nacimiento del río Laña, que acaba muriendo en el Zadorra. De normal el agua fluye suavemente más abajo.
Esta sencilla gruta se ha formado por los plegamientos geológicos que han conformado los Pirineos. Durante años se ha usado como corral como refugio para el ganado. Para llegar a ella hay que salir de la Fábrica de Armas de Orbaizeta hasta el collado de Azpegui, en el límite con Francia y el cromlech del mismo nombre. Desde allí se toma a al derecha una pista asfaltada a muy estrecha hasta una zona de bordas. Desde lejos se ve la cueva. Se puede visitar todo el año, aunque en época de lluvia y nieve hay que se muy prudente por el riesgo de resbalar.