El 9 de abril de 1980, Carlos Garaikoetxea fue designado lehendakari del primer Gobierno vasco tras la dictadura. En el día en que se cumplen 45 años de aquel histórico momento en la Casa de Juntas de Gernika, Imanol Pradales ha querido enviar un mensaje lleno de cariño y agradecimiento a quien "permitió sentar los cimientos de la Euskadi actual".
En un mensaje en redes sociales lehendakari ensalza el legado de aquel "'dream team'', con Garaikoetxea al frente, que consiguió hacer de Euskadi un país "moderno, competitivo y avanzado". "Nos han permitido a quienes hemos ido tomando el testigo disponer de herramientas para seguir creciendo en prosperidad y en bienestar", destaca entre las líneas del texto.
En esta línea, buena parte del mensaje del lehendakari Pradales se centra en poner en valor la puesta en marcha de una Euskadi tal y como la conocemos, cimentada en los valores y la capacidad que ostentaron quienes conformaron el Gobierno de Garaikoetxea.
"La visión política, la habilidad negociadora y la buena sintonía de Garaikoetxea con Adolfo Suárez", recuerda Pradales, fueron clave para "desencallar desencuentros y puntos de fricción". "Permitieron alcanzar un acuerdo para restablecer el Concierto para Euskadi en diciembre de 1980, pocos días antes de la dimisión de Suárez", afirma.
Legislatura de ilusión e incertidumbres
Cabe destacar que quienes lideraron aquella primera legislatura (1980-1984) asumieron dicho reto tras casi 40 años de dictadura y represión. Euskadi comenzaba una nueva etapa, marcada por la ilusión y la esperanza, pero también "por las dudas y la incertidumbre".
"El País estaba destrozado en todos los órdenes… había que darle una medicina de urgencia"
"No era para menos. Tocaba levantar un País y un Gobierno en una situación de máxima inestabilidad y crudeza, con un riesgo de involución democrática evidente", añade Pradales. Prueba de ello, como quedó demostrado poco después, fue el intento de Golpe de Estado en 1981. En este contexto, tan solo unos meses antes, Carlos Garaikoetxea se decidió a dar un paso al frente.
Un momento que Pradales califica como "convulso y delicado", marcado, a su vez, por el "macabro techo histórico de la violencia" de ETA. Durante aquella primera legislatura, recuerda el lehendakari, Euskadi tuvo que afrontar otras tragedias como la explosión de gas en un colegio de Ortuella, en la que perdieron la vida 50 niños de entre 5 y 6 años y tres adultos. "Fue una de las tragedias más duras que ha padecido nuestro Pueblo. También tuvo que lidiar con las inundaciones de 1983, que dejaron 34 víctimas mortales y cuantiosísimos daños materiales", se refiere sobre las tragedias que marcaron una época.
Crisis económica e industrial
En clave de desarrollo económico, Carlos Garaikotxea y el resto de miembros que conformaron su Ejecutivo fuero promotores del impulso de una economía vasca, azotada por las crisis económicas del petróleo (1973 y 1979) y el declive de “nuestra industria”. A todo esto se sumó, remarca Imanol Pradales, que “el lehendakari partía de cero, con todo por hacer, máximo responsable de un Gobierno sin estructuras, personal, sede, capital, ni recursos suficientes”.
El propio Garaikoetxea lo resumía sin paños calientes en distintas entrevistas en las que rememoraba aquella época: “El País estaba destrozado en todos los órdenes: cultural, lingüístico, infraestructural, económico, sometido a un expolio fiscal tremendo… había que darle una medicina de urgencia”. “En ese momento había que tener pulso fino para hacer política real y no sólo política de proclamaciones y de objetivos estratégicos, que eso es fácil; lo difícil es decir cómo se llega a un objetivo estratégico”, evocaba en 2010 Garaikoetxea.
Cuadratura del círculo
Para homenajear todo su esfuerzo y agradecer la herencia recibida, el Ejecutivo vasco prepara un homenaje al Gobierno de Carlos Garaikotexea que tendrá lugar el próximo 16 de junio. "Había que tomar decisiones de calado, hacerlo rápido, y en un contexto muy adverso. La cuadratura del círculo", asevera en el mensaje de agradecimiento.
"La visión política, la habilidad negociadora y la buena sintonía con Adolfo Suárez permitieron alcanzar un acuerdo para restablecer el Concierto"
Por último, el lehendakari define a Garaikoetxea como “hombre de gran formación y cualificación”, que se rodeó de personas de “enorme valía”: Pedro Miguel Etxenike, Mario Fernández, Pedro Luis Uriarte, Luis Mari Retolaza, Ramón Labayen, Javier Caño, Carmelo Renobales, Jesús Agirre, Félix Ormazabal, Xabier Lasagabaster, José Luis Robles, Carlos Blasco y Javier García Egotxeaga. Todos ellos conformaron un "'dream team’ del Partido Nacionalista Vasco" que, “desde la colaboración público-privada”, no tardarían en hacer realidad hitos de calado.
A continuación, Pradales se refiere a la puesta en marcha de instituciones fundamentales como la UPV/EHU, Osakidetza, la Ertzaintza, EITB o el Ente Vasco de la Energía.
Y fue así como Euskadi también fue dando pasos en el desarrollo de su autogobierno, se aprobó la Ley del Euskera y se asentaron las bases de la política industrial y del sistema educativo vasco poniendo en marcha, por ejemplo, el decreto para regularizar las ikastolas: "Ezina, ekinezegina”. En definitiva, "nos han permitido a quienes hemos ido tomando el testigo disponer de herramientas para seguir creciendo en prosperidad y en bienestar", reflexiona el lehendakari. Por último, alude al momento que atraviesa Euskadi y llama a seguir avanzando con el mismo espíritu del Gobierno vasco tras la dictadura. "Cada generación tiene sus propios desafíos e incertidumbres (...) Encarémoslos con la misma determinación, autoexigencia y acierto de aquellas personas que dieron lo mejor cuando todo estaba por hacer”, concluye el lehendakari.