Cientos de personas se han manifestado este sábado por las calles de San Sebastián, en el último día de sus fiestas de Semana Grande, contra la política penitenciaria "de excepción" y por "la vuelta a casa" de todos los presos de ETA.

La marcha ha partido a las 12.30 horas del Boulevard donostiarra, para finalizar en el puerto, con el lema 'Etxera bidea gertu' ('El camino a casa cerca', en euskara), en una pancarta.

La movilización, organizada por la red ciudadana Sare, Donostiako Piratak y la Comisión de Fiestas de Donostialdea, ha discurrido en ambiente festivo, con gigantes y música. Entre los manifestantes estaban miembros de EH Bildu como el exalcalde donostiarra Juan Karlos Izagirre o su portavoz en el Consistorio de la capital guipuzcoana, Reyes Carrere, entre otros.

Al término de la marcha los portavoces de Sare Nahikari Iturbe e Inaxio Oiarzabal han leído un comunicado en el que se ha destacado que "gracias al esfuerzo de todos y a la activación permanente de la sociedad" se ha conseguido "dejar atrás las cárceles que están más lejos de Euskal Herria: Andalucía, Murcia, Levante eta Galicia".

"Un primer paso importante"

"Este cambio supuso un alivio para familiares y amistades que se han visto en la obligación de recorrer demasiados kilómetros a lo largo de muchos años", han subrayado. A su juicio, ha sido "un primer paso importante dentro del proceso de vuelta a Euskal Herria que estamos viviendo actualmente".

No obstante, han advertido de que "queda mucho camino por recorrer" para "superar las vulneraciones que siguen sufriendo todavía los presos vascos y sus familiares". "Este camino lo recorreremos conjuntamente, como hemos hecho hoy", han afirmado.

Los portavoces de Sare han asegurado que continuarán con este "trabajo activo de manera conjunta en la calle" hasta lograr que todos los presos de ETA "estén en Euskal Herria". En este sentido, han recordado que, en la actualidad, "hay 58 presos lejos de Euskal Herria".

Además, han señalado que "la vuelta a Euskal Herria no es la última etapa, sino la primera", porque "a la mayoría de los presos vascos todavía se les niega la aplicación de la política penitenciaria ordinaria". "Es el momento de materializar el proceso de vuelta a casa establecido a nivel penitenciario", han defendido.

Para ello han sostenido que "la excepción debe dejar de ser norma; la progresión de grado, los permisos de salida, la vuelta a casa de las personas presas con enfermedades graves, los derechos de paternidad/maternidad y de familia". "Tenemos que seguir avanzando en ese camino", han defendido.

"Brazo jurídico de la extrema derecha"

Además, desde Sare han denunciado "la actitud de la fiscalía de la Audiencia Nacional, que actúa como brazo jurídico de la extrema derecha política, interponiendo recursos constantemente contra las decisiones de las juntas de tratamiento de las prisiones, cuando aprueban el tercer grado penitenciario o conceder permisos".

"Apuestan por la confrontación continua. Por impedir que podamos transitar hacia una paz justa y, a través de ello, a la convivencia", han lamentado. Frente a ello, han abogado por los "acuerdos" y por "soluciones justas". "Sobran quienes continúan abogando por la confrontación y en la venganza", han añadido.

Finalmente, han recordado que el próximo 8 de octubre Sare ha organizado una jornada en San Sebastián, con una manifestación y un festival de música, para reivindicar "que el camino de vuelta a casa está cerca".