El secretario general de Sortu, Arkaitz Rodríguez, ha expresado su "apuesta inequívoca" por EH Bildu y EH Bai y por abrir estas organizaciones a otros sectores para conformar un "frente amplio soberanista y progresista que lidere y conduzca a este país y a un futuro de soberanía y justicia social".

Asimismo, ha trasladado su "apuesta clara" por que EH Bildu y EH Bai "gobiernen el mayor número de instituciones" porque "es bueno para la gente, para el país y para el proceso de emancipación nacional y social". "No nacimos para ser eterna oposición, nacimos para ganar y vamos a ganar", ha resaltado en su intervención en la , que se celebra este sábado en la localidad navarra de Lakuntza.

Rodríguez ha afirmado que los nuevos retos "globales, generacionales, estratégicos y civilizacionales" requieren "una nueva mayoría y un nuevo liderazgo". Una mayoría "soberanista y progresista, que ya existe en el país pero que ahora, de cara al próximo ciclo electoral, hay que operativizar en términos electorales e institucionales".

Por otro lado, ha asegurado que un nuevo liderazgo "sólo puede venir de manos del soberanismo de izquierda porque aquellos que con sus políticas nos han traído a esta situación difícilmente pueden llevarnos a otro lado".

El secretario general de Sortu ha llamado a "poner el país en pie y en marcha para hacer frente a todos los retos globales, generacionales, estratégicos y civilizacionales que tenemos ante nosotros" y para avanzar en la "recuperación de derechos sociales y económicos y la recuperación de soberanía".

También, ha continuado, para "lanzar un mensaje muy claro a esas derechas reaccionarias" a las que ha dicho: "iros al carajo fascistas de mierda, que aquí hay un pueblo digno".

Arkaitz Rodríguez ha abogado por afrontar "la nueva crisis social y económica en ciernes" desde el principio de que "esta crisis no la pueden volver a pagar los de siempre: mujeres, jóvenes, personas racializadas, pensionistas, los trabajadores". "La tienen que pagar los ricos, las grandes empresas, el oligopolio eléctrico, la banca, que para eso son los grandes responsables de la misma y para eso los rescatamos hace 10 años con miles de millones de euros".

Igualmente, ha llamado a "intervenir" el mercado energético, "acabar con el oligopolio eléctrico" y "garantizar el control público, tanto de éste como del resto de sectores estratégicos". Ha instado a subir el Salario Mínimo Interprofesional y las pensiones y a adaptarlos a la "realidad socioeconómica y la relación de fuerzas" existente en "Euskal Herria".

De la misma manera, ha apostado por "acabar con la estafa inmobiliaria y garantizar que todo el mundo tiene acceso a una vivienda digna sin necesidad de hipotecar su vida para siempre". También ha propuesto la construcción de un "sistema público de cuidados porque no es aceptable descargar el trabajo reproductivo sobre los hombros de las mujeres", y ha apelado a "acabar con la mercantilización de la educación y la sanidad porque no es aceptable que nadie haga negocio con los derecho fundamentales de la gente".

Finalmente, ha reivindicado una "reforma fiscal en profundidad que acabe con los privilegios de los ricos y haga que, de una vez por todas, paguen más quienes más tienen".