- La revelación de que la diputada de Vox, Macarena Olona, se empadronó el pasado noviembre en Salobreña (Granada) para poder concurrir así a las elecciones a la Junta de Andalucía que fueron convocadas a posteriori el 19 de junio generó estupor por lo descarado de la maniobra. El propio propietario de la vivienda, el responsable provincial de Vox y concejal en el municipio, Manuel Martín Montero, admitió sin rubor que Olona “no vive aquí”. Ello provocó que el Ayuntamiento de Salobreña encargara a la Policía Local realizar las comprobaciones pertinentes para verificar si la candidata “reside habitualmente en el municipio”. Una vez confirmado que no es así tras varias visitas al inmueble, la alcaldesa socialista, María Eugenia Rufino, dictó ayer una “resolución de inicio de baja de oficio” de Macarena Olona.
Su baja definitiva del padrón municipal afectaría a su candidatura a las elecciones autonómicas como cabeza de lista del partido de ultraderecha por la provincia de Granada, ya que los candidatos están obligados a presentar “certificado de inscripción en el censo electoral o en el padrón municipal, al objeto de acreditar su condición política de andaluces” de acuerdo con una instrucción de la Junta Electoral. Esta noticia cayó ayer como una bomba en la precampaña, dadas las buenas expectativas que las encuestas otorgan a Vox y sus posibilidades reales de gobernar junto al PP.
El propio presidente del PP-A y candidato a la reelección como presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, dijo ayer que le gustaría poder “confrontar” en la campaña con todos los candidatos que se han registrado, incluida la de Vox, Macarena Olona, pero “esta es una decisión que no corresponde ni al PP ni a nadie, sino a la Junta Electoral Central”. La propia afectada achacó esta situación al “binomio PP y PSOE porque están aterrados tras haberme escuchado decir que voy a entrar en San Telmo con una auténtica escoba”.