Aluvión de críticas a Feijóo por eludir la foto en la puesta de largo del pacto con Vox

Feijóo alegó que su prioridad estaba en presentar una alternativa económica al Gobierno de Pedro Sánchez, por lo que desde primera hora se reunió con empresarios y sindicatos. Así las cosas, se limitó a felicitar a Mañueco a través de un mensaje en Twitter. “Castilla y León vuelve a tener al mejor presidente en el momento en el que más lo necesita. Su vocación siempre será estar al servicio de todos los ciudadanos”, escribió después de que Mañueco jurara su cargo.

Aunque el vicesecretario de Organización del PP, Miguel Tellado, limitó el pacto con Vox a esta comunidad porque Feijóo “aspira a representar a una gran mayoría de españoles y no depender de nadie”, a este debieron pitarle los oídos durante toda la jornada. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, le acusó de ser un “escapista” por ausentarse de la toma de posesión de Mañueco. “Es evidente que ha puesto una enorme excusa para no acudir a una foto que le mancha y es que es el primer presidente del PP que permite un gobierno con la extrema derecha”, censuró en TVE.

Ya en Castilla y León, y tras el acto institucional, el único procurador de C’s en las Cortes, Francisco Igea, tachó de “cobarde” al líder del PP. “Los ciudadanos saben muy bien lo que significa este gesto, que no es un buen acuerdo”, alegó, en su tono habitual sin pelos en la lengua. Muy explícito en sus reproches fue también el secretario autonómico del PSOE, Luis Tudanca, que criticó que el PP utilice las instituciones para hacer un acto “partidista” que, a su juicio, “blanquea” la deriva de Feijóo y sus pactos con el presidente de Vox, Santiago Abascal.

Tal y como hizo el lunes de la semana pasada en la investidura de Mañueco, Abascal sí acudió al pleno de toma de posesión, donde no desaprovechó la oportunidad de dedicarle un zasca a Alberto Núñez Feijóo, aunque con la mano abierta. En declaraciones a los periodistas, aseguró que para su formación ayer “no había un sitio más importante en el que estar” que en Castilla y León, aunque evitó reprochar al presidente del PP su ausencia. “No me corresponde a mí juzgar las agendas de otros líderes, pero no dudo del apoyo de Feijóo a sus líderes territoriales”, aseveró Abascal. Concluyó que para Vox “sí es una prioridad defender este Gobierno”.

Entre los defensores de la decisión de Feijóo de no acudir al pleno, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, avaló sus razones para ausentarse y calificó de “gran pacto” el alcanzado entre el PP y Vox, basado en lo que calificó como “socialismo-free”. La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, puso en valor que su partido estaba en “ambos frentes”, ella acompañando al presidente de Castilla y León y su líder estatal con los sindicatos y la patronal.

El propio Mañueco agradeció el “respaldo” que “siempre” ha tenido de Feijóo y añadió ambos estaban ayer donde debían. En su discurso, ofreció “moderación, diálogo, tolerancia, integración y un espíritu abierto y constructivo”.

La paridad, ausente. El Gobierno del PP y Vox en Castilla y León será uno de los menos paritarios en todo el Estado, en lo que puede interpretarse como un nuevo peaje de los populares al partido ultra. El mismo estará integrado por nueve hombres y tres mujeres, muy lejos de las siete mujeres de un total de diez consejerías que hay en Extremadura, por ejemplo. Por descontado, las tres mujeres del Ejecutivo de Alfonso Fernández Mañueco corresponden al PP y no a Vox, que ha amarrado tres carteras, Agricultura, Cultura e Industria, además del vicepresidente. Preguntado sobre esta cuestión, el presidente de la comunidad defendió que son “los mejores hombres y mujeres” para este Gobierno.