El lehendakari se propone activar todos los resortes para afrontar la emergencia humanitaria y económica desatada por la guerra de Rusia contra Ucrania. Ante esta situación excepcional, que para el lehendakari es tan grave como lo fue en su momento la pandemia del coronavirus, Iñigo Urkullu ha decidido reactivar las rondas de contactos con los grupos del Parlamento que ya llevó a cabo en aquella época, con una primera fase en noviembre de 2020 y otra en marzo de 2021. Urkullu comenzó a teclear la semana pasada varios mensajes de texto para todos los partidos del Parlamento Vasco, con el objetivo de mantener encuentros la semana que viene con el PNV, EH Bildu, PSE, Elkarrekin Podemos-IU, PP+C's e incluso Vox, que abriría la ronda el día 5, si bien este partido se decanta por no acudir a ninguna convocatoria de Urkullu.

Fuentes de Lehendakaritza consultadas por este periódico aseguran que pondrá sobre la mesa la invasión de Ucrania y las consecuencias de la guerra, el plan Berpiztu de reactivación económica, el calendario legislativo y el plan de inversiones, además de los debates que quieran suscitar los grupos y a los que el lehendakari se abre. Según ha podido saber este periódico, se prevé también que las diputaciones forales anuncien este martes una propuesta fiscal para reanimar a los sectores más tocados por esta situación, en plena carestía de las energías y de escasez de las materias primas que afectan a la industria, el sector primario y también los transportes, entre otros ámbitos.

El Gobierno vasco ya anunció ayudas para las empresas relacionadas con el mercado ruso y ucraniano. Y se tratará de articular este plan de país con el mayor consenso posible, a pesar de que PNV y PSE dispongan de una mayoría absoluta más que suficiente. Urkullu no ha querido realizar escenificaciones públicas con estos encuentros y se ha tenido noticia de ellos antes por boca de grupos parlamentarios.

¿POR QUÉ AHORA?

Tras la emergencia sanitaria que supuso la pandemia del coronavirus, ahora se cierne otra sombra sobre la comunidad autónoma. Se trata de la guerra de Rusia contra Ucrania y sus consecuencias en una economía presidida por la industria electrointensiva, más sensible a los precios de la energía. En este sentido, el lehendakari ha decidido retomar la ronda de contactos a pesar de que parecía un formato en desuso en los últimos meses.

Urkullu había llegado en 2021 a la conclusión de que, sin una situación de extrema gravedad que lo exigiera, estas reuniones suelen servir para que los grupos traten de buscar el desgaste de su gabinete, algo que había sido criticado por la oposición. Pero ahora, ante la "magnitud" de los temas que están sobre la mesa, los refugiados y las consecuencias económicas, ha decidido retomar esta fórmula. Es una cuestión de coherencia también en un momento en que el PNV lamenta la ausencia de diálogo del presidente español, Pedro Sánchez, que solo llama a sus socios sobre la bocina mientras presiona a los grupos para que le den su respaldo.

'FEELING' CON LA OPOSICIÓN

En paralelo, el lehendakari va a poner sobre la mesa las leyes pendientes. Como ya informó este periódico, se propone lanzar el debate de cinco pactos de país este año, buscando para ello un consenso que vaya más allá de PNV y PSE y que garantice la duración de estos consensos más allá de esta legislatura. Son las leyes de Educación, Salud, Sistema Vasco de Garantía de Ingresos y para la Inclusión, Sistema Vasco de Empleo, y Transición Energética y Cambio Climático. Su plan normativo recoge 151 iniciativas, y 17 son anteproyectos de ley.

De hecho, aunque formalmente no ha existido una dinámica institucionalizada de reuniones cada cuatro meses tras la última en marzo de 2021, el lehendakari sí intervino en el pacto sobre la Ley Antipandemia con Elkarrekin Podemos-IU reuniéndose con Miren Gorrotxategi, y en el pacto presupuestario con EH Bildu, con una cita con Maddalen Iriarte. Esta ronda llega en un momento de buena disposición por parte de estos dos grupos, que han realizado sus aportaciones y participado en el pacto sobre el borrador parlamentario de educación. Elkarrekin Podemos-IU se sumó igualmente a las leyes de Igualdad y Juventud. No obstante, el debate de Ucrania se entrecruza con el modelo energético, y Podemos hace en ese caso bandera política de la lucha contra los beneficios de las eléctricas e identifica al PNV con los intereses de Iberdrola.