- Con la Ley de Memoria Histórica y Democrática en pleno trámite parlamentario tras ser aprobada por el Consejo de Gobierno, y después de que el Parlamento Vasco expresara el pasado jueves un respaldo mayoritario a la ley de abusos policiales, entre los objetivos de la legislatura sigue pendiente reactivar el debate de los grupos políticos para lograr un acuerdo en materia de convivencia. En dicho contexto, este lunes se reunirá el Consejo de Dirección de Gogora, el órgano sobre el que la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, hizo recaer al inicio de su mandato la tarea de dar continuidad a estos trabajos.

El punto final de la ponencia de memoria de la Cámara de Gasteiz, que celebró su última reunión en marzo de 2019, abocó a este escenario. Por la misma desfilaron, desde su puesta en marcha siete años antes, decenas de expertos, víctimas y también exmiembros de ETA. Pero el PP se descolgó de este foro a las primeras de cambio y el consenso se puso cuesta arriba por el rechazo de EH Bildu a asumir el suelo ético en defensa de los derechos humanos y los valores democráticos, que había sido aprobado en el Parlamento Vasco, como punto de partida a partir del cual desplegar el trabajo de la ponencia, lo que provocó un serio choque con el PSE.

Fue durante la primera visita de Beatriz Artolazabal al Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos, el 16 de septiembre de 2020, para conocer a su equipo de trabajo y al de la dirección de Derechos Humanos y Atención a las Víctimas, cuando la consejera situó a Gogora como el espacio idóneo para alcanzar el deseado consenso en materia de convivencia. Argumentó como puntos a favor el hecho de que todos los grupos están representados en el Consejo de Dirección de Gogora -Vox no cuenta porque no es grupo como tal y forma el grupo mixto en el Parlamento-, incluido el PP, que abandonó la ponencia de la Cámara vasca.

En su declaración durante esa visita, Artolazabal explicó que “Gogora cuenta con un alto grado de aval político en el seno de su Consejo y, además, tiene un liderazgo reconocido en el ámbito institucional en los ámbitos de memoria, derechos humanos y convivencia”. Añadió que el instituto que dirige Aintzane Ezenarro “está consolidado y ha hecho un importante recorrido de consenso público”. La hoja de ruta que expuso ese día estaba respaldada además por el acuerdo de gobierno suscrito por PNV y PSE poco antes, el 1 de septiembre de 2020.

El Consejo de Dirección de Gogora se reúne dos veces al año, y tal y como aparece en la convocatoria, este lunes día 21 de febrero estará presidido por el lehendakari Iñigo Urkullu. Le acompañarán la consejera Beatriz Artolazabal, el viceconsejero de Derechos Humanos, Memoria y Cooperación, José Antonio Rodríguez Ranz, pero no así la directora del instituto de la memoria desde que abrió sus puertas el 10 de noviembre de 2015, Aintzane Ezenarro, que según ha podido saber este medio ha dado positivo por coronavirus. El inicio de la reunión está fijado a las 16.30 horas.

A la pregunta de si se están dando pasos más o menos públicos en favor de un consenso político en materia de convivencia, Urkullu respondió el pasado miércoles en una entrevista concedida a Radio Euskadi de forma afirmativa. A continuación puso como ejemplo el caso de Errenteria, uno de los municipios más castigados por la violencia, que puso en marcha “una alianza municipal en la diversidad” después de que su alcalde, de EH Bildu, realizara un acercamiento explícito a las víctimas. Esta experiencia se expuso en la extinta ponencia parlamentaria de paz y convivencia.

El Consejo de Dirección de Gogora está compuesto por Iñigo Iturrate en representación del PNV; Julen Arzuaga (EH Bildu); Miren Gallastegui (PSE); Miren Gorrotxategi (Elkarrekin Podemos-IU) y Carmelo Barrio (PP+C’s). También por las tres diputaciones de la CAV, miembros de la asociación de municipios vascos, Eudel, del ámbito de la educación y tres representantes sociales nombrados por el Parlamento Vasco. Se trata del médico forense Paco Etxeberria y dos víctimas del terrorismo, Josu Elespe -hijo de Froilán Elespe, concejal del PSE de Lasarte asesinado por ETA en 2001- y María Jauregi -hija de Juan María Jauregi, gobernador civil de Gipuzkoa asesinado por ETA en 2000-.

Precedente

El Consejo de Dirección de Gogora aprobó en su anterior encuentro el Programa de Actuación 2021-2024, que recoge la creación de Gogoragunea, el espacio expositivo de Gogora en Bilbao; Martxoak 3 Memoriagunea, el memorial de las víctimas de los sucesos del 3 de marzo de 1976 en Gasteiz, y la renovación del Museo de Gernika. Este plan contempla impulsar “un proceso de reflexión y debate que pueda sentar las bases para la construcción de una memoria compartida en clave de futuro”.

Objetivos

Entre los objetivos de la legislatura, la consejera Beatriz Artolazabal citó en septiembre de 2020 “proceder al despliegue” de la ley de víctimas de abusos policiales, una vez logró el aval del Tribunal Constitucional. También citó impulsar la aprobación de la nueva Ley de Memoria Histórica y Democrática y “mantener la relación y el compromiso público con las asociaciones de víctimas del terrorismo y directamente con las víctimas”.

“Gogora cuenta con un alto grado de aval político en el seno de su Consejo de Dirección”

Consejera de Igualdad y Justicia