- El lehendakari, Iñigo Urkullu, defendió ayer la necesidad de normalizar la política penitenciaria, una década después del cese del terrorismo y con ETA ya disuelta. Así se posicionó en respuesta a una pregunta en el pleno de control del Parlamento Vasco de la representante de Vox, Amaia Martínez, quien censuró “el modelo vasco de gestión penitenciaria; ese que equipara a presos de ETA con cualquier otro tipo de reclusos, obviando que muchos de ellos son asesinos genocidas, cuyas víctimas tenían un denominador común, que era ser españolas”.
Urkullu recordó que “vivimos una nueva realidad, ansiada durante décadas; hace más de diez años que finalizó la actividad terrorista de ETA. ETA ya no existe. Es el momento de repensar si alguna de las medidas legales de excepción, penales y penitenciarias adaptadas en el contexto del azote terrorista siguen teniendo sentido años después de la desaparición y disolución de ETA”.
En esa línea, el lehendakari aseguró que con la transferencia de la gestión de las prisiones vascas, el Ejecutivo de Lakua abre la puerta “a un modelo de reinserción que dé oportunidades a todos los presos y presas, independientemente del delito cometido, sin tratos diferenciados”.
En su opinión, la aplicación de una misma legislación y una misma política penitenciaria a todas las personas es “la médula de una concepción democrática de la política”. Por eso, señaló, “somos partidarios de afrontar las reformas legales que sean oportunas para favorecer los fines constitucionales de las penas privativas de libertad”.
Según Urkullu, “las políticas de excepción no tienen sentido ni en Euskadi ni en ningún lugar en que impere un Estado de Derecho” y se aplique “un axioma básico de la democracia: todas y todos somos iguales ante la ley, y la ley ha de ser igual para todas y todos”. Urkullu preguntó a la representante de Vox si “su partido comparte este principio básico de la democracia”.
La pregunta de Martínez se produjo a raíz del acto en el que la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, abogó por el trato individualizado a cada persona presa; “eso sí, teniendo en cuenta el delito cometido”, dijo la parlamentaria de Vox. “Pero no aclaró -añadió- si hacer estallar un coche bomba o pegar un tiro en la nuca merecían un trato diferenciado o no. Y tampoco habló de las circunstancias de las víctimas, y en este caso no tenemos claro si diferencia entre aquellas que saben que están en prisión los culpables de los atentados y esos cientos de personas que siguen sin saber; las víctimas indirectas de casi 380 crímenes de ETA”.
Martínez ve inviable el trato individualizado a los presos de la banda porque “insisten en presentarse como colectivo y siguen al pie de la letra la estrategia diseñada por el entorno de ETA para facilitar su acercamiento a cárceles vascas, también para obtener la progresión de grado y disfrutar de una libertad que muchos no merecen”.
“Me pregunto -añadió- si ustedes sumarán a la excepcionalidad que supone tratar a los presos de ETA como a cualquier otro reo una creciente benevolencia para la concesión de progresiones de grado sustentada en su buen comportamiento, en su participación en talleres formativos de diversa índole”.
Según dijo, “hasta los jueces de la Audiencia Nacional están dando al traste con esta estrategia, al negarse a dar por bueno el reconocimiento del dolor causado mediante la firma de un documento tipo nunca personalizado, en el que ni incluye ni se exige la palabra arrepentimiento”.
Además del acto de la consejera Artolazabal, Martínez hizo referencia al informe de la Guardia Civil conocido escasas horas antes y que desvela los contactos de miembros de Sortu, Sare o de expresos de ETA con el Ministerio del Interior para gestionar los acercamientos de algunos reclusos. “Sobre cuestiones en las que este Gobierno no haya participado es otro ámbito en el que usted tiene que preguntar”, le respondió Urkullu.
“Expreso perdón”. El juez de vigilancia penitenciaria de la Audiencia Nacional ha resuelto la regresión al segundo grado penitenciario del preso de ETA Jon Crespo por “no haber pedido expreso perdón a las víctimas”, informa Efe. Etxerat informó el jueves de que Crespo deberá reingresar en segundo grado en la prisión de Basauri, después de que la AN estimara el recurso interpuesto por la Fiscalía y dejara sin efecto su progresión. En prisión desde el año 2002, recorrió las cárceles de Valdemoro, Topas, Murcia y El Dueso, hasta la cárcel de Basauri, que propuso su clasificación en tercer grado en octubre de 2021, antes de que el Gobierno Vasco recibiera la transferencia de prisiones.
“Las políticas de excepción no tienen sentido en ningún lugar en que impere un Estado de Derecho”
“Hace más de diez años que finalizó la actividad terrorista de ETA; ETA ya no existe”
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