- La mesa de diálogo ha desaparecido de la agenda de asuntos prioritarios del Gobierno español. Así lo vino a reconocer ayer el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, quien pidió que no se le reclame a su Ejecutivo ponerse las pilas cuanto antes con esta herramienta, como le exige el Govern de Pere Aragonès. Moncloa entiende que este es un problema heredado de la etapa del PP al frente del gabinete y que es preciso ir con calma, aunque en realidad son las exigencias del calendario electoral, entre otros, el motivo presente de esta demora. “Es algo que ha venido larvándose muchos años, no nos pidan que tengamos prisa”, manifestó en Onda Cero.
Acto seguido defendió que la situación actualmente en Catalunya es “infinitamente mejor” que cuando llegaron al Gobierno, que entonces había una “tensión insoportable” y hoy al menos es “habitable”. Al ser preguntado respecto a si puede haber acuerdos con ERC en los próximos meses para que se pueda reunir la mesa, el ministro reconoció que por el momento “no hay fecha” y reiteró que cuando exista un acuerdo se hará público y se convocará.
En este contexto, Aragonès ha demandado a Pedro Sánchez que no se ponga de perfil, como hizo Mariano Rajoy, y que desligue esta herramienta de los acontecimientos en la política estatal. Es más, el president cree que no habrá un segundo tren para la mesa si se deja pasar este tren. Cuando a Sánchez se le interpeló sobre si sus tiempos eran los mismos que los del Jefe del Govern, el líder del PSOE se limitó a indicar: “yo espero que sean los mismos”.