- La coincidencia de la apertura del año judicial en Euskadi con el décimo aniversario del fin de la violencia de ETA marcó ayer la convocatoria en el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), cuyo presidente, Iñaki Subijana, instó a impedir el “sufrimiento” de las víctimas del terrorismo por actos de exaltación a los victimarios, y exigió un reconocimiento “explícito” del daño injusto causado por ETA.
Ante el lehendakari, Iñigo Urkullu, y la fiscal superior del País Vasco, Carmen Adán, que también intervinieron, Subijana reivindicó el concepto de “justicia victimal” como una “atalaya” desde la que oponerse a las victimizaciones, algo “especialmente importante” dado el aniversario que se cumplía ayer. “La justicia a las víctimas implica enfrentarse a los mensajes de reforzamiento de la posición de los victimarios que degradan a las víctimas o de invisibilización hermenéutica que les priva de significado personal, social e institucional”, añadió.
En la que fue su primera intervención como máximo representante del TSJPV en la apertura del año judicial 2021-22, tras tomar posesión de su cargo el pasado 29 de abril en sustitución de Juan Luis Ibarra, Subijana dijo que “los valores de conocimiento y recuerdo de lo sucedido, de reconocimiento explícito del daño injusto causado y de restauración del mismo hasta el máximo posible, son los pilares ineluctables de la justicia victimal”.
Defensor de la justicia restaurativa, explicó que establece “la responsabilidad por la infracción cometida, la reparación del daño injusto causado hasta el límite de lo factible y restablecer la vigencia de la ley como instrumento regulador de la convivencia social”. A su juicio, “hacer notar los actos injustos y establecer estándares públicos de responsabilidad por ellos ayudan al bienestar humano y refuerzan la confianza en la justicia de las instituciones”.
Al acto de ayer también asistieron otros representantes institucionales, como los consejeros del Gobierno Vasco Josu Erkoreka, Beatriz Artolazabal e Idoia Mendia; la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria; el delegado del Gobierno español en la CAV, Denis Itxaso, o el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto. En su intervención, Urkullu dijo que con la vuelta a la normalidad tras la pandemia afloran, de nuevo, algunos de los problemas precedentes, como la falta de acuerdo para la renovación del CGPJ. “Algo que, después de tanto tiempo, resulta difícilmente comprensible”, dijo.
El lehendakari recordó que el “bloqueo” del CGPJ provocó que la presidencia del Tribunal Superior de Justicia de Euskadi “estuviera en situación de interinidad durante meses”, hasta que finalmente fue nombrado Iñaki Subijana, a quien trasladó su deseo del “mayor de los éxitos” en su tarea. Urkullu agradeció también su “entrega y dedicación” de servicio público a su predecesor en el cargo, Juan Luis Ibarra, y adelantó que los Presupuestos del Ejecutivo vasco del año próximo contemplarán “la financiación precisa” para la digitalización y la creación de nuevos espacios judiciales, como reclamó Subijana.
Lehendakari. En su intervención, el lehendakari, Iñigo Urkullu, tuvo unas palabras de recuerdo para el juez José María Lidón, asesinado por ETA en 2001. Acto seguido, Urkullu reclamó “a quienes ejercieron la violencia” y a los que “la ampararon” que hagan “una autocrítica ética”.