Madrid - El candidato a la investidura, Pedro Sánchez, está dispuesto a estudiar nombres de profesionales independientes propuestos por Unidas Podemos para que se incorporen a su gabinete de ministros. Es la primera vez que líder del PSOE verbaliza públicamente su disposición a que el líder de la formación morada nombre a ministros independientes en su Ejecutivo. Su gesto se produce a solo unos días del encuentro que mantendrá con él el próxima martes dentro de la ronda de contactos con los líderes de los partidos mayoritarios de cara a la formación de un Gobierno.
“Si Podemos tiene personas independientes de reconocido prestigio no rechazaré esas sugerencias”, dijo Sánchez en una entrevista en Telecinco. El presidente en funciones negó que tenga un sentido monopolizador del poder y avanzó incluso su intención de conformar un Consejo de Ministros con más independientes que el actual si resulta investido, pero rechazó de manera frontal un Gobierno de coalición como demanda Iglesias.
“No necesitamos un cogobierno, dos gobiernos en uno. Necesitamos un gobierno con un mensaje coherente”, un Gobierno “progresista, pero que no dependa de las fuerzas independentistas”, resumió Sánchez. “Lo que ofrece Unidas Podemos no es precisamente eso”, apuntilló.
El candidato a la investidura explicó que el PSOE y Unidas Podemos tienen “muchísimas coincidiencias” en políticas sociales, pero también “grandes diferencias”, por ejemplo sobre cómo resolver la crisis catalana. A su juicio, Podemos defiende el derecho de autodeterminación de los catalanes y votaron en contra de suspender a los presos del procés electos. De ahí que su oferta de Gobierno de cooperación a Podemos se circunscriba a incorporar a miembros de los morados en cargos intermedios de la Administración y a estudiar propuestas de independientes de reconocido prestigio para dirigir algunos ministerios que le hagan llegar desde la formación de Pablo Iglesias.
Y para garantizar la estabilidad del país evitando que la gobernabilidad dependa de los partidos independentistas, Sánchez insistió en reclamar la abstención de PP y Ciudadanos en su investidura, que espera que pueda seguir adelante en este mes de julio. Las dos formaciones conversadoras rechazan abstenerse, pero tienden la mano a Sánchez para intentar alcanzar pactos de Estado una vez consiga formar gobierno. El primero de esos pactos de Estado que se podría hacer, les ha respondido Sánchez, es precisamente que “no bloqueen la formación de un Gobierno progresista que no dependa de fuerzas independentistas”.
independentistas catalanes Sánchez justifica su desconfianza en los partidos independentistas por la decisión que tomaron en el último momento de tumbar su proyecto de Presupuestos, lo que llevó al adelanto de las elecciones generales. “Todos hemos de sacar una lección. No se puede hacer descansar la gobernabilidad de España en las fuerzas independentistas”, subrayó.
A pesar de la última encuesta del CIS que le otorga una intención de voto al PSOE del 40%, Sánchez aseguró que no ha pensado en convocar de nuevo elecciones el 10 de noviembre porque considera que los españoles han cerrado un ciclo electoral “muy intenso”, con hasta cuatro convocatorias (generales, municipales, autonómicas y europeas) en las que han dicho con claridad que “quieren que gobierne el PSOE”. “No quiero llegar a esa situación”, señaló en relación con la repetición electoral, comprometiéndose a hacer todo lo posible por evitarlo. “Estoy dispuesto a negociar con todos a cualquier hora”, añadió, dejando sin contestar la pregunta de si se creía ese sondeo del CIS. - DNA