pamplona - El PSN se siente autorizado por Pedro Sánchez y proseguirá las negociaciones para la formación de Gobierno foral, mientras reitera que no va a pactar con EH Bildu ni con Navarra Suma. Así se pronunció el secretario de Organización de los socialistas navarros, Ramón Alzórriz, después de la reunión mantenida ayer por sendas delegaciones del PSN e Izquierda-Ezkerra (I-E), y tras la que exigió al presidente de UPN, Javier Esparza, que deje de crear “crispación” al hablar de apoyar la investidura de Sánchez si los socialistas apoyan su elección para hacerse con el poder en la Comunidad Foral. Los “escaños cruciales” en el Congreso son los de Podemos, los del PNV y los del resto de grupos parlamentarios. “No hay unos votos más importantes que otros”, zanjó.

Alzórriz insistió en la presentación de la candidatura de la socialista María Chivite, avalada por 23 de los 50 escaños de la Cámara (PSN, Geroa Bai, Podemos e I-E), y a partir de ahí la responsabilidad puede ser también de Navarra Suma (UPN, Ciudadanos y PP), coalición a la que invitó a abstenerse. Pese a los pronunciamientos de Sánchez y de otros miembros de la Ejecutiva federal, el dirigente del PSN, que cerró la ronda de contactos con Geroa Bai, Podemos e I-E, aseveró que en el partido no hay “dos versiones” y de hecho consideró que el presidente español en funciones “avaló” la postura del PSN.

Para Alzórriz, la intención de Sánchez de reunirse con UPN para explorar la viabilidad de ese ofrecimiento se inscribe en la ronda de reuniones del presidente con todos los grupos del Congreso para la formación “exclusivamente” del Gobierno español. Tras destacar que están “coordinados permanentemente” con la dirección del PSOE, extrajo la conclusión de que hay una “clara voluntad” de sumar 23 escaños, que “superarían a los 20 que tienen ahora las derechas”, en alusión a Navarra Suma. “Nuestro compromiso con la ciudadanía es firme y sigue adelante”, declaró el socialista navarro, quien repitió que el PSN no dará sus votos a Navarra Suma ni a su candidato, Javier Esparza, pero tampoco pactará con EH Bildu, que tiene 7 parlamentarios.

En ese sentido, solicitó “a la derecha”, que “dejen de utilizar Navarra cada cuatro años, que no nos traigan la crispación que crearon en Catalunya”. Alzórriz censuró con dureza a UPN, del que dijo que ha “traicionado” a Navarra y a sus socios, Ciudadanos y PP, al ofrecerse a apoyar la investidura de Sánchez. Al ser preguntado por las palabras de la vicepresidenta Carmen Calvo, quien estimó que se debe priorizar la constitución del Gobierno español sobre el navarro, subrayó que esos objetivos no son excluyentes y son “importantes los dos”.

Sobre la necesaria abstención de EH Bildu para que ese acuerdo a 23 pueda gobernar en Navarra, indicó que “aquí se nos ha pedido responsabilidad en numerosas ocasiones al Partido Socialista”, pero “ahora la responsabilidad la tiene también Navarra Suma”. “Se puede abstener Bildu o se puede abstener Navarra Suma”, señaló Alzórriz.

contactos con i-E Por su parte, la coordinadora general de IU en Navarra y candidata de la coalición I-E, Marisa de Simón, afirmó que “desde la humildad”, al tener una parlamentaria de 50, harán “todo lo posible para que no haya un Gobierno de derechas”. Tras reconocer que para que el Ejecutivo foral tenga estabilidad son necesarios 26 apoyos, matizó que ellos no son partidarios “de excluir a nadie” en la negociación. - DNA