madrid - El Gobierno español ha iniciado los trámites para paralizar la venta a Arabia Saudí de 400 bombas de precisión láser del ejército español. El Ministerio de Defensa corroboró ayer que se devolverán los 9,2 millones de euros abonados por este material dejando así sin efecto el contrato firmado entre España y Arabia Saudí en enero de 2015. Los artefactos explosivos están destinados a bombardear Yemen.
El pasado 16 de agosto, el Ministerio de Defensa afirmó que iba a revisar la venta de armas todavía en trámite y “que pudieran implicar la utilización directa de este tipo de armamento contra población civil”, como ocurrió en el ataque contra un autobús con niños en Yemen a primeros del pasado mes de agosto. En el atentado murieron 51 personas, de las que 40 eran menores de edad.
La autorización de venta de este tipo de material no depende de Defensa, sino de la Secretaría de Estado de Comercio, del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, que preside la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y de Doble Uso.
Los máximos responsables de Amnistía Internacional, FundiPau, Greenpeace y Oxfam Intermón, promotoras de la campaña Armas Bajo Control, entregaron ayer a la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, las firmas que han recogido contra las ventas de armamento a Israel y Arabia Saudí.
En esta reunión, los representantes de las cuatro ONG reclaman al Gobierno español el “cese inmediato” de la venta a estos dos países de armamento que pueda utilizarse “para cometer atrocidades en Yemen o en los Territorios Palestinos ocupados” y también exigen “el fin del secretismo en las exportaciones de armas”.
Este viernes la secretaria de Estado de Comercio, Xiada Méndez, comparecerá en la comisión de Defensa del Congreso para informar sobre la venta de armas y material de defensa de doble uso, como establece la ley.
Según Amnistía Internacional, España vendió a Arabia Saudí en 2017 unos 270 millones de euros en materia militar, cantidad que se eleva hasta algo más de 900 millones si se cuenta desde 2015, cuando estalló el conflicto en Yemen.
Según datos del Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación de la Paz, España ocupa el séptimo lugar del ranking global de exportaciones de armamento, aunque a mucha distancia de las grandes potencias que ocupan los principales. En ese funesto listado, Estados Unidos y Rusia ocupan los dos primeros lugares, seguido de China, Francia, Alemania, Reino Unido y España.
España se ha convertido, en el período 2012-2016, en el tercer proveedor de armas de Arabia Saudita, un país involucrado en conflictos regionales como el de Yemen, que la ONU calificó de “desastre humanitario”. - DNA