barcelona - Junts per Catalunya dio ayer la puntilla a la posibilidad de que Carles Puigdemont sea candidato a president. Después de que el Tribunal Constitucional (TC) advirtiera de que sería nulo todo intento de investirle de forma telemática y de que el Consell de Garanties Estatutàries (CGE) considerara por unanimidad inconstitucional reformar la Ley de Presidencia para hacerlo a distancia; la formación que lidera el ex jefe del Govern descartó ayer forzar a la Mesa del Parlament a la desobediencia para propulsar como aspirante a Puigdemont. Lo certificó el portavoz adjunto de JxCat, Eduard Pujol, quien censuró que el CGE tiene “asientos caducados”, es decir, miembros cuyo mandato ya expiró, como recordó que ocurrió con el TC durante la elaboración de la sentencia del Estatut. “Hay cosas que sorprenden” del Consell, como el hecho de que no avale el procedimiento de lectura única para este caso, cuando han sido aprobadas por esta vía “ocho leyes de desarrollo estatutario, incluso la propia ley del CGE”, manifestó.
Pese a estas circunstancias, y aunque no renuncian a investir a Puigdemont, reconoció que el grupo deberá analizar a fondo las repercusiones que puede tener la decisión del TC antes de decidir los futuros pasos, cuando queda menos de un mes para que termine el plazo máximo del 22 de mayo para escoger a un president. En todo caso, JxCat “no forzará ninguna situación de desobediencia, porque sería alimentar aún más el conflicto en la mala dirección”. En este escenario, ahondó en que “es necesario mantener la opción de Puigdemont”, pero sin entrar “en un escenario de desobediencia”, porque no hay voluntad de “generar nuevos problemas”, que es algo que no quieren principalmente los presos soberanistas encarcelados, quienes exigieron que se les mande a prisiones catalanas.
Sin embargo, el dirigente de JxCat recalcó que cuando “en un parlamento llegan advertencias formales”, como en este caso las del TC, “es que alguna cosa falla”. Pujol matizó que “la amenaza como herramienta de solución de un conflicto que es político no lleva a ninguna parte” y “nunca puede ser bueno para la gestión política”. En esta línea, censuró al Gobierno de Mariano Rajoy que haya situado “la amenaza siempre detrás de toda acción”, lo que solo ha llevado a “situaciones no deseadas”, cuando la solución al conflicto debería ser “dialogada”.
Precisamente, desde Madrid, el portavoz del Ejecutivo del PP, Iñigo Méndez de Vigo, consideró que los últimos pasos del TC y del Consell “cierran las puertas de forma definitiva” a que Puigdemont sea investido president. En todo caso, avanzó que recurrirán “cualquier fraude”, después de que el presidente del Parlament, Roger Torrent, haya convocado un pleno para el 3 y 4 de mayo con un orden del día que incluye la modificación de la Ley de Presidencia para tratar de investir a distancia a Puigdemont.
loas al 27 de octubre Entre tanto, el ex president recordó ayer los seis meses que se cumplen desde la declaración de independencia del 27 de octubre, avisando de que “los enemigos de la libertad son poderosos, pero las personas libres lo son aún más”, y exhibió un “regalo” del artista chino Ai Weiwei. En un mensaje en Twitter, Puigdemont rememoró que “hace seis meses iniciábamos un camino de libertad y república para un país mejor, más justo, más democrático”, en relación a la declaración unilateral, justo tras la cual el Gobierno del PP aplicó el artículo 155 de la Constitución y suspendió el autogobierno. Puigdemont citó el artículo 21 de la Declaración de los Derechos Humanos: “La voluntad del pueblo es el fundamento de la autoridad del Estado”.
“Hoy, por muchas razones, por lo que pasó hace seis meses, por lo que pasó ayer, por lo que aún está pasando -en casa y en el mundo- y por lo que pasará mañana... este regalo de Ai Weiwei es deliciosamente oportuno”, escribió el líder de JxCat.