Bilbao - En su comparecencia del pasado jueves en Bilbao, los portavoces del Foro Social Permanente aseguraron que el fin de ETA -su “desmovilización”, según su propia terminología- se producirá antes del próximo verano. Éste será uno de los hitos de un proceso de paz y normalización que ha entrado en una fase decisiva, y en el que el Foro Social anunció que pretende integrar al Colectivo de presos de ETA -EPPK en sus siglas en euskera- como un agente más, para lo que avanzó que se producirían reuniones con sus portavoces en las cárceles. Apenas dos días después, tuvo lugar el primero de dichos encuentros entre el representante del Foro Social Agus Hernan y el portavoz del EPPK Juan Antonio Olarra Guridi en la cárcel de Granada. En su transcurso, el histórico dirigente de la banda le trasladó la petición generalizada de los presos, por primera vez en la trayectoria del colectivo, de beneficios de forma individualizada para mejorar su situación penitenciaria.
En un comunicado, el Foro Social explicó que, si bien el 96% de los reclusos se encuentran en situación de primer grado, la mayoría ya están solicitando su paso a segundo grado. Pese a que la mayoría de estas demandas son rechazadas con el argumento de que se trata de miembros de “una organización terrorista no disuelta”, varios de estos reclusos han presentado ya recurso a la propia Junta de Tratamiento e, incluso, tras una nueva denegación, a los Juzgados de Vigilancia Penitenciaria. Según el relato de Olarra Guridi, que cumple una condena de más de 1.000 años de prisión, en aproximadamente 20 cárceles los presos han solicitado destino, es decir, trabajar en la cárcel, lo que ha sido aceptado en la mayoría de los casos por la dirección de los centros penitenciarios. “Es algo que no habían hecho históricamente, salvo excepciones”, aseveró ayer Agus Hernan en Radio Euskadi.
“En la mayoría de los casos han tenido respuestas positivas, es decir, los presos están ya, hoy en día, en cerca de 20 cárceles del Estado español, en destino”, insistió el portavoz del Foro Social Permanente. También la mayoría de los reclusos ha solicitado “el paso de primero a segundo grado”, aunque estos procesos “son más largos”. “Muchos se han encontrado con rechazos con el argumento de ser miembros de una organización terrorista no disuelta. Ellos estiman que este argumento ha dejado de tener razón y en próximos meses, antes de verano, esperamos que ETA anuncie su desmovilización”, indicó. En base a ello, según explicó, los internos están recurriendo. El comunicado del Foro Social agregaba que, a juicio del EPPK, el rechazo a pasar a segundo grado “se está convirtiendo en un cuello de botella para que los presos puedan iniciar un recorrido jurídico dentro de la prisión y, cuando se den las condiciones, poder acceder a beneficios penitenciarios”.
Marco de resolución En opinión del Foro Social Permanente, el encuentro mantenido entre Hernan y Olarra Guridi resultó “positivo”, toda vez que “permitirá avanzar hacia la construcción de un marco de resolución para las personas presas”. El mismo buscará “el equilibrio entre el derecho de las víctimas a la verdad, la justicia y la reparación, y la aspiración de la sociedad de construir un marco de convivencia sin personas presas y huidas”.
De la reunión de ambos el sábado en la cárcel de Albolote, en la que Hernan informó a Olarra Guridi del trabajo llevado a cabo en torno a la cuestión de los presos de ETA, también trascendió “la disponibilidad del colectivo de presos a reconocer el daño causado y a entablar marcos de diálogo adecuados con las víctimas”, en los que se busque hablar, pero “evitando los marcos de reproche”, explicó Agus Hernan en la entrevista radiofónica. En este sentido, los reclusos, por boca del portavoz del EPPK, pusieron como ejemplo “los foros de convivencia locales” que existen en localidades de Gipuzkoa como Lasarte, Errenteria o Azpeitia.