madrid - El extesorero del PP Luis Bárcenas no quiere que haya rastro del tribunal que le ha juzgado en el caso Gürtel en el próximo juicio por la caja B que tendrá lugar en este 2018. Su defensa ha solicitado que se aparte al magistrado José Ricardo de Prada, el único que ha resistido a la polémica modificación del tribunal que ha acabado con la mayoría que posibilitó citar al presidente español, Mariano Rajoy, como testigo. El tribunal que juzgará la presunta financiación irregular del PP iba a estar formado por los tres mismos magistrados que han dejado visto para sentencia el primer gran juicio de Gürtel pero ahora es posible que no esté ninguno.

Por otro lado, el también extesorero popular Álvaro Lapuerta llamó personalmente al Gobierno madrileño para pedir contratos para la constructora Bruesa porque había pagado en negro la sede del PP en la CAV. También solicitó intervenir en la adjudicación de las obras de la carretera M-404 en la localidad de Griñón a FCC y maniobró para modificar la calificación urbanística de la finca El Tagarral de Tres Cantos, de Martinsa, según publicó ayer el periódico El Mundo. Este diario agregó que el argumento recurrente era que las empresas por las que intercedía se habían portado muy bien con el PP y nutrido la caja B que gestionaba. - DNA